El primer ministro, Beniamin Netanyahu, reiteró sus críticas al pacto preliminar alcanzado con Irán sobre su programa nuclear y afirmó que seguirá presionando al Gobierno de EE.UU. para que busque un “mejor” acuerdo.
“No estoy intentando matar cualquier acuerdo. Estoy intentando matar un mal acuerdo”, comentó Netanyahu a la cadena NBC, en el marco de una ronda de entrevistas con varias televisiones estadounidenses.
Según Netanyahu, el acuerdo preliminar entre el G5+1 (China, EE.UU., Francia, Reino Unido y Rusia más Alemania) e Irán anunciado en Lausana (Suiza), es una “amenaza” para Israel y sus vecinos, y convierte en “legítimo” el programa nuclear de Teherán, que es algo “ilegítimo”.
“Todavía hay tiempo para conseguir un mejor acuerdo”, afirmó el primer ministro a la cadena CNN.
Netanyahu dijo también, en declaraciones a la cadena CNN, que el acuerdo preliminar levantará las sanciones contra Irán demasiado rápido, lo que dará al régimen de Teherán recursos para “incrementar su maquinaria del terror en todo el mundo”.
A diferencia de Netanyahu, el presidente de EE.UU., Barack Obama, está insistiendo desde el anuncio del entendimiento con Irán en que se ha logrado un “buen acuerdo”, que es “de lejos” la mejor opción para su país, sus aliados y el mundo entero, dado que niega a Teherán el “el plutonio necesario para fabricar una bomba”.
No obstante, el escepticismo de Netanyahu y sus críticas son compartidas por los republicanos en el Congreso de EE.UU. y también por numerosos demócratas.
Del lado de Obama se puso la influyente senadora demócrata Dianne Feinstein, quien comentó a CNN que desearía que Netanyahu “se contuviera” a la hora de hablar del acuerdo con Irán, porque él no ha ofrecido “ninguna alternativa real” para impedir que ese país desarrolle un arma nuclear.
“Francamente, es un acuerdo mejor de lo que esperaba. Creo que puede ser un acuerdo práctico y muy útil, y puede ser la señal” de un “nuevo día” con Irán, declaró Feinstein.
(EFE)