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Biografia de Nicky Cruz



Reverendo Nicky Cruz (nacido el 6 de diciembre 1938 en San Juan, Puerto Rico) fue el líder de la pandilla de Nueva York llamada Los Mau-Mau. Luego se convertió en uno de los ministros religiosos mundiales más conocidos.
Cruz fue criado por sus padres, los cuales practicaban brujería y espiritismo. Ellos lo atormentaban mentalmente diciéndole cosas como “Hijo de Satanás.” El barrio donde él vivía era uno de los peores en Puerto Rico y Nicky siempre se estaba metiendo en problemas.
Vida en la pandilla
En el 1 de enero de 1955 — cuando Nicky tenía 16 años — sus padres lo mandaron a vivir con su hermano mayor en Nueva York. Se mudó a Fort Greene, Brooklyn a un complejo de vivienda con más de 30,000 habitantes puertorriqueños y afroamericanos. En los guetos de Nueva York, como Fort Greene, la vida es muy difícil, y unirse a una pandilla era una de las pocas opciones que los adolescentes tenían para poder sobrevivir.
En poco tiempo Nicky se hizo líder militar de la pandilla. Este puesto era importante porque es el que se reúne con sus pares de otras pandillas para discutir detalles sobre las peleas, por ejemplo la hora y cuáles armas serán utilizadas. Para el 1958, Nicky ya era el “presidente” de la pandilla, la cual se dedicaba a robos y homicidios. El joven también estaba involucrado con drogas y su compañero Mannie Durango murió en sus manos en una pelea entre pandillas.

Conversión
El Reverendo David Wilkerson estuvo en el vecindario de Nicky predicando cuando Nicky se encontró con él. Hablaron hasta que Nicky lo amenazó con la muerte. Luego por la tarde el señor Wilkerson dio la vuelta por la base de la pandilla de Nicky donde el joven se calló a golpes.
Dos semanas después, el Reverendo volvió al barrio para una reunión envagélica. Cuando el joven Nicky se enteró dicidió que iba a asaltar a Wilkerson de nuevo, esta vez con otros miembros de su pandilla.
La reunión se estaba llevando a cabo en el “St. Nicholas Boxing Arena” y ahí era donde Nicky iba a ir. Según Nicky, cuando llegó, algo extraño le pasó a su cuerpo. Empezó a sentirse culpable por los acontecimientos y se puso a orar. Wilkerson oró con Nicky y el joven le pidió a Dios que le perdonara. También le pidió el perdón del reverendo.
El siguiente día el joven se entregó a la policía con todas su armas. Rápidamente comenzó a estudiar la Biblia y se matriculó en la escuela. Estudió varios temas, incluyendo a la teología. Luego se convertió en un predicador y volvió a su barrio de niñez, donde le predicó a los otros miembros de su pandilla para que aceptaran a Jesucristo como su salvador. Hasta el nuevo líder Israel Narvaez lo aceptó cuando Nicky los visitó.

Ministerio
Nicky es el encabezado de “Nicky Cruz Outreach” un programa con el propósito de proveer ayuda para los adolescentes con problemas en la vida. El programa ha tenido mucho éxito y tiene sucursales en EEUU, América Latina y Europa. También fundó varios centros de rehabilitación para los drogadictos. Es miembro del Comité Honorario de The Presidential Prayer Team el cual incluye personas como Gerald Ford, Jerry Colangelo entre otros.

Literatura
En 1970 se editó una película sobre la vida de Nicky Cruz titulada The Cross and the Switchblade la cual incluye Pat Boone como El Reverendo David Wilkerson y Erik Estrada como Nicky Cruz. En febrero del 2000, una especial de televisión sobre Nicky Cruz fue titulada Run Baby, Run fue presentada en EEUU.
Nicky también hizo un documental de 55 minutos con Art Linkletter llamdo “No Need to Hide”. Nicky llevó Art a varios sitios vigilados por su pandilla.
Los siguientes libros sobre la vida de Nicky Cruz han sido editados en varios idiomas: “The Cross and the Switchblade”, de David Wilkerson, “Run, Baby, Run,” de Nicky Cruz, and “The Gangster Who Cried: The story of Nicky Cruz”, de R.J. Owens. Tambié fue co-autor del libro, “The Magnificent Three”, con Charles Paul Conn.

Biografia de Kenneth Copeland

En mayo de 1967, Kenneth Copeland caminaba a orillas del río Arkansas en Tulsa, Oklahoma, cuando el Señor depositó la visión del ministerio en su corazón—predicar el Evangelio a las naciones. Un llamado que incluiría usar toda voz disponible para predicar el mensaje fe sin comprometer su integridad, con el fin de satisfacer las necesidades de la gente en todo el mundo. 

Todo comenzó, sin embargo, con pasos simples de obediencia y fe, caminando en el amor y en la integridad de la Palabra de Dios. 

En 1957, a los 20 años, con el éxito discográfico Pledge of Love, colocado en el lugar #14 en las listas de popularidad nacional y el #1 en las locales, Kenneth parecía estar encaminado hacia una exitosa carrera como cantante, especialmente después de aparecer en el programa American Bandstand y junto a Ricky Nelson en la revista Dig Magazine. Pero Dios tenía otros planes. Conoció a Gloria y le propuso matrimonio en la primera cita. Ella aceptó. En ese tiempo, vivían en un apartamento alquilado, tenían una cama plegable sobre ruedas y una cafetera en la que cocinaban. Ellos dejaban los alimentos afuera, al frente de su casa para mantenerlos fríos. No tenían abundancia de nada. Pero un día, mientras Gloria leía una Biblia que la madre de Kenneth le había regalado a su hijo, ella oró:«Dios, toma mi vida y haz algo con ella». Al poco tiempo Kenneth se convirtió, y cinco años después, en la primavera de 1967, cuando tenía 30 años, obedeció a Dios. Él y su familia empacaron y se mudaron a Tulsa, Oklahoma, para ingresar a la Universidad Oral Roberts. 

Kenneth llenó una solicitud para trabajar como copiloto de Oral Roberts y lo contrataron como parte de la tripulación de vuelo que iba a todas las reuniones en carpas y campañas. Fue en ese tiempo que aprendió a pasos agigantados, en un entrenamiento sobre la marcha. A los pocos meses de estar trabajando para Oral, Kenneth recibió el llamado de Dios para comenzar su propio ministerio, y así fue como el 7 de septiembre de 1967 nacieron los Ministerios Kenneth Copeland. 

«Los Ministerios Kenneth Copeland nacieron del amor por la gente y de un compromiso de llevar la Palabra a la gente», dice Kenneth Copeland.«Nuestras vidas están completamente dedicadas a ministrar a la gente. Cuando decimos: "Estamos aquí para usted", queremos decir hasta el punto que: todo lo que hacemos, todo lo que predicamos, todo programa de televisión donde nos presentamos, todo lugar donde ministramos y todo lo que decimos y hacemos ha sido orado, cuidadosamente planeado y diseñado para ministrar a la gente. Dios nos llamó para llevar al mundo entero su mensaje de amor y de fe. Usted es importante para nosotros y queremos ayudarlo a encontrar en la Palabra de Dios las respuestas que necesita».

Kellie Copeland, hija de Kenneth y Gloria, cree que esto es lo que distingue a Kenneth y Gloria.«La gente usa todo el tiempo frases como "iglesia de la Palabra", "gente de la Palabra", "movimiento de la Palabra", dice Kellie. Hace cuarenta años la fe era algo ambiguo. No era un movimiento. Para nosotros era simplemente un estilo de vida. Mamá y papá decían: "Si está en la Palabra, viviremos de acuerdo a lo que nos enseña. Cambiaremos nuestra vida para que se ajuste a la Palabra". Esa es la forma como vivimos nuestra vida. Toda decisión que ellos toman está basada en la Palabra».

«La integridad y la integridad en la Palabra de Dios», añade John Copeland, hijo y Director Ejecutivo de los Ministerios Kenneth Copeland. «Son los cimientos en los que ha permanecido este ministerio durante 40 años y seguirá permaneciendo los próximos 40 años. La gente dice que la palabra de fe nos enseña que nunca más tendremos problemas, pero esto no es cierto. Nuestras familias han enfrentado adversidades. En ocasiones solo atravesamos dificultades. No es el hecho de que no enfrentemos obstáculos o no enfrentemos adversidades, sino lo que hacemos cuando estamos de frente a esas adversidades. ¿Cómo se maneja usted? ¿Qué hace usted? Usted puede elegir. Ellos nos enseñaron a no aceptar lo que venga, sino a luchar, a estar firmes en contra de ello, a creerle a Dios y a la integridad de Su Palabra, y eso nos llevará al otro lado».

Kenneth y Gloria aprendieron el principio de relacionarse con Dios mediante la fe. Gracias a la bendición del Señor ellos han enseñado a sus hijos, a sus nietos y a los socios de su ministerio alrededor del mundo acerca del poder de relacionarse con Dios y con Su Palabra todos los días y en todos los aspectos de sus vidas, haciendo de ello una gran herencia y un patrimonio.

Esa herencia continúa para la gloria de Dios.

BIOGRAFIA de Cash Luna

Conocido familiarmente como Cash porque cuando era niño decía que se llamaba "Cash-los", recibió a Jesús como Señor y Salvador en 1982, siendo aún joven. Desde entonces, comenzó a servirle apasionadamente, predicando en parques, calles y buses. En esa misma época inició sus estudios en la universidad privada Francisco Marroquín en la ciudad de Guatemala. Obtuvo, con honores Cum Laude, una Licenciatura en Administración de Sistemas de Información. Durante su época de estudiante contrajo matrimonio con Sonia, quien le dio tres preciosos hijos: Carlos Enrique, Juan Diego y Ana Gabriela y además, lo ha apoyado fielmente en su ministerio.

Se dedicaba exitosamente a sus negocios personales cuando fue llamado por Dios para servirle a tiempo completo. Una noche, su esposa y él  sintieron tan fuerte la presencia del Señor que el peso del Espíritu Santo los hundía en la cama. Desde ese día, los milagros y prodigios le siguen a dondequiera y está convencido con todo su corazón que no es su presencia, sino la del Espíritu Santo la que toca a las personas.

En 1994, el Señor los llamó a pastorear y de esa forma nace Casa de Dios,  la congregación que hoy preside y que se conoce por la manifestación de la presencia del Señor. Siendo ésta aún muy pequeña, la gloria de Dios los visitó dejando como ebrios en el Espíritu a muchos de los presentes, tal y como ocurrió el día de Pentecostés. Hoy es una de las iglesias más grandes e influyentes de Latinoamérica. Su cobertura abarca múltiples servicios que se realizan en un auditórium propio construido con el esfuerzo de todos.

Ese mismo año inició unas reuniones nocturnas de unción abiertas al público en general. Se denominaron Noches de Gloria por la impresionante manifestación de la presencia y del poder del Espíritu Santo. Éstas se han desarrollado en cruzadas de sanidad y milagros que se llevan a cabo en muchos países hispanoamericanos. Simultáneo a las cruzadas nació el programa diario de televisión que transmite dichas reuniones y las prédicas de la iglesia. 

Los pastores Cash y Sonia son reconocidos por su ministerio apostólico al Cuerpo de Cristo, el cual se manifiesta en el pastoreo de ministros, la renovación de cientos de iglesias locales y la bendición a cristianos en muchos países. Su principal objetivo como ministro ha sido desarrollar discípulos dentro y fuera de la iglesia, a través de la Palabra de Dios y la unción del Espíritu Santo, provocando un fuerte crecimiento en el equipo de trabajo y en el ministerio.

Los pastores Luna tienen como objetivo puesto por Dios, ver Su gloria manifestarse en el mundo entero a través de la unción y  su visión es alcanzar las multitudes para Cristo.

Biografia de Joyce Meyer



Joyce Meyer, es una de las maestras bíblicas más prácticas del mundo. Reconocida por el periódico New York Times como la autora de mejor ventas, sus libros ayudan a millones de personas a encontrar esperanza y restauración a través de Jesucristo.

A través de los Ministerios Joyce Meyer, ella enseña cientos de temas, ha escrito más de 80 libros y realiza aproximadamente 15 conferencias por año.  Hasta la fecha más de 12 millones de sus libros se han distribuido alrededor del mundo y en el año 2007 se vendieron mas de 3.2 millones de copias. Joyce también tiene programas de radio y televisión; Disfrutando la Vida Diaria, con una audiencia de 3 billones personas.

A pesar de haber sufrido abuso sexual de niña y el dolor del abuso emocional de su primer matrimonio, Joyce descubrió la libertad de vivir victoriosamente aplicando la Palabra de Dios en su vida y a cambio desea ayudar a otros hacer lo mismo.  Desde su batalla con el cáncer del ceno hasta los retos diarios que trae la vida, ella habla de manera practica y abiertamente acerca de sus experiencias para que otros puedan aplicar en sus vidas lo que ella ha aprendido.

A través de los años, Dios le ha proveído a Joyce con muchas oportunidades de compartir su testimonio y el mensaje del Evangelio que transforma vidas.  De hecho, la revista Time la eligió como una de las lideres evangélicas mas influyentes en Norteamérica.  Ella es un testimonio increíble del trabajo dinámico y redentor de Jesucristo. Ella cree y enseña que a pesar del pasado o errores de una persona, Dios tiene un plan para ellos y puede ayudarlos en su camino a disfrutar la vida diaria.

Joyce tiene un doctorado en teología de la Universidad Life Christian en Tampa, Florida; dos doctorados honorarios, uno en divinidad de la Universidad Oral Roberts en Tulsa, Oklahoma y el otro en teología sagrada de la universidad Grand Canyon en Phoenix, Arizona.  Joyce y su esposo Dave han estado casados por más de cuarenta años y son los padres de cuatro adultos. Dave y Joyce residen en St. Louis, Missouri. 

BIOGRAFIA - CARLOS ANNACONDIA



Carlos Alberto Annacondia; Nació en 12 de Marzo de 1944, en la ciudad de Quilmes, Provincia de Buenos Aires. En 1970 contrajo matrimonio con María Luján Revagliatti. En la actualidad son padres de Carlos, María Eugenia, Ángel, José María, Rebeca, Moisés, Elías, Ruth y Natanael. 8 de sus hijos están ya casados, y tienen 14 nietos. Conoció al Señor el 19 de Mayo de 1979 de San Justo, provincia de Buenos, en una Cruzada Evangelística con el Rev. Manuel A. Ruiz, de Panamá. Siendo un prospero hombre de negocios, Dios lo llamó y lo levantó como Evangelista de Su Reino, y como tal, ejerce su ministerio desde el año 1981. Comenzó su ministerio predicando en la década de '80 en las villas de emergencia del Gran Buenos Aires. Su mensaje ha sido oído por multitudes de personas de distintas razas y condiciones sociales, de los cinco Continentes. Se estima que varios millones de personas tomaron la decisión por el Señor Jesucristo en sus Cruzadas. Actualmente vive en la Ciudad de Buenos Aires y preside el Equipo "Misión Cristiana Mensaje de Salvación", de la Unión de las Asambleas de Dios y es miembro de una Iglesia en Buenos Aire

Evangélicos brasileños crecen un 61 por ciento en 10 años dice censo


Evangélicos brasileños crecen un 61 por ciento en 10 años dice censo
Brasilia.- Un total de 42 millones 300 mil brasileños, dijeron ser evangélicos en el 2010, un 61,45 por ciento más que los 26 millones 200 mil existentes en el 2000, dice datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
La cantidad de evangélicos en el 2000 representaba el 15,4 por ciento de la población brasileña y los de 2010, corresponden al 22,2 por ciento de los habitantes del gigante suramericano, indica el IBGE.

En 1991 los evangélicos abarcaban solo el nueve por ciento de la población y en 1980, sólo el 6,6 por ciento.
Pese a ese incremento, los católicos siguen siendo mayoría en Brasil, religión que profesan 123 millones 300 mil personas en 2010, lo que representa un 64,6 por ciento de los cerca de 191 millones de habitantes del país, un 1,3 por ciento menos que en 2000, cuando eran 124 millones 900 mil, el 73,6 por ciento de la población.
Sin embargo, el IBGE dice que los que se declaran sin religión subieron del 4,7 % al 8,0 % de los encuestados, lo que equivale a cerca de 15 millones de personas, según los cálculos del IBGE.
Ese grupo engloba a una gran mayoría de personas sin una religión definida y también a 615.096 ateos y 124.436 agnósticos.
Un 2,0 % de los brasileños profesa la religión espiritista y un 0,3 % es fiel de credos de origen africano como el candomblé o el umbanda.
Fuente: ABC, Prensa Latina y InfoBae.

José Luis de Jesús Miranda queda en ridículo tras no cumplirse su profecía


José Luis de Jesús Miranda queda en ridículo tras no cumplirse su profecía
El día 30 de junio, los fieles de la Iglesia Creciendo en Gracia dijeron: “¡El día ha llegado!”, para que se transformara el cuerpo de Miranda en inmortal pero no ocurrió.
La profecía del “Jesucristo hombre” no se cumplió. Una vez más José Luis de Jesús Miranda quedó en ridículo igual como le ocurrió a Harold Camping el año pasado quien en dos ocasiones fechó el fin del mundo.
El día 30 de junio, los fieles de la Iglesia Creciendo en Gracia dijeron: “¡El día ha llegado!”, para se transformara el cuerpo de Miranda en inmortal pero no ocurrió, tampoco se cumplió que dos tercios de la humanidad morirían y que el Vaticano sería destruido y que sólo los fieles a Miranda sobrevivían.

En los últimos días la propaganda de Miranda sobre la supuesta transformación fue anunciada en el centro de la capital de Puerto Rico mostrando una imagen del ser religioso llamado el señor y citando un versículo de Hebreos.
En la red social de Twitter, muchos internautas se burlaron de Miranda y cuestionaron la falsa profecía, diciendo que todos sus amigos estaban vivos o habían visto a “Jesucristo hombre” atravesar paredes con su cuerpo transformado.
El pasado sábado 30 de junio, en Honduras, miles de personas, entre hombres, mujeres, niños y ancianos, en todo el país, salieron a la calles a manifestarse, muchos de ellos iban marcados con el número de la bestia, “666”, a la espera de transformarse en inmortales y poder vivir para siempre, según informó el diario La Tribuna.
Los líderes de las iglesias evangélicas y católicas recomendaron a la población no creer en falsos profetas, que son lobos vestidos de ovejas, ya que el regreso de Jesucristo no está calendarizado y nadie conoce cuándo ocurrirá.
Foto: La Tribuna.: Según los miembros de la secta Creciendo en Gracia, las religiones Católica y Protestante desaparecerán y darán paso al nuevo dios, Jesús Miranda.
Traducido y adaptado por NoticiaCristiana.com de Gospel Prime y con información del diario La Tribuna de Honduras.

Caminar por la senda estrecha


Cuando su vida haya terminado, y esté delante del Creador para rendir cuenta de cómo vivió, ¿qué le dirá? ¿Que trabajó duro, que tuvo una casa hermosa, y que llevaba a su familia a tomar vacaciones maravillosas? ¿O que le sirvió sin demora y obedientemente, tratando de ser como Jesús en todo lo que decía y hacía?
Después que muramos, todos nuestros logros serán puestos delante del Señor para ser evaluados. En ese momento, no importará cuántos elogios haya usted recibido, ni qué tan lejos llegó en su profesión, ni cuánto dinero acumuló. Lo único que importará será lo que Dios piense en cuanto a cómo usó usted sus talentos, dones y oportunidades que Él le dio.
La Biblia está llena de sabios consejos que, si se ponen en práctica, pueden llevar a la prosperidad terrenal. Sin embargo, lo importante es si su deseo principal es seguir al Señor o lograr la prosperidad terrenal. Cuando alguien se dedica a Cristo y anda en obediencia a Él sin importar las consecuencias, puede tener éxito tanto en el mundo como a los ojos de Dios.
Los primeros pasos
El Salmo 1 brinda una descripción de cómo caminar por la senda estrecha del éxito según Dios, siguiendo ciertos principios bíblicos diariamente. Usted puede comenzar a practicarlos ahora mismo, con la ayuda del Espíritu Santo.
Tenga cuidado con sus relaciones: El primer versículo del salmo tiene que ver con las relaciones, y recomienda evitar tres cosas si queremos agradar a Dios.
No ande en consejo de malos. Nunca seremos verdaderamente exitosos si buscamos la dirección de quienes no conocen al Señor. Esto se aplica a todos los aspectos de la vida: los negocios, las finanzas, las relaciones, y todo lo demás. El título impresionante de alguien o su amplia experiencia, no son ninguna garantía de que su consejo sea bueno. Incluso, debemos tener cuidado en cuanto a aceptar la guía de otros cristianos, porque no todos los creyentes son espiritualmente maduros y sabios. Su consejo puede ser, en realidad, más carnal que espiritual. La única manera de proteger nuestro caminar, es comparar todo consejo que recibamos, con lo que dice la Biblia. Si hay alguna contradicción, ignore ese consejo, porque no le conducirá donde el Señor quiere que vaya.
No ande en camino de pecadores. Aunque es posible que tenga que vivir o trabajar con quienes están en un mal camino, usted no tiene que participar en sus prácticas. Cuando los demás le inciten a transigir y a hacer lo que usted sabe que está mal, no tenga temor de estar solo en el camino de Dios. Estamos llamados a ser luz del mundo, no a mezclarnos con sus tinieblas. El Señor nos pone en medio de incrédulos, para que puedan ver al Salvador en nosotros (Mt 5.14-16). Si Dios quiere prosperarlo en su lugar de trabajo, Él lo hará a su propia manera y en su tiempo.
No se siente en silla de escarnecedores. Si usted se está preguntando quiénes son los escarnecedores, simplemente prenda su televisor. El mundo está lleno de personas que se burlan de Dios, de su pueblo, y de su Palabra. Atacan con un lenguaje grosero, o descalifican con su razonamiento intelectual. Los creyentes nunca deben sentirse a gusto entre ellos. A pesar de que estamos llamados a ser testigos de Cristo en un mundo perdido, es prudente que tracemos líneas de protección para no ser influenciados negativamente o engañados.
Conságrese a la Palabra de Dios:  El Salmo 1.1 menciona las cosas que no deben hacerse­, pero el versículo 2 nos dice qué prácticas positivas debemos incorporar a nuestras vidas para poder realmente tener éxito.
Deléitese en la ley de Dios. A la persona que se deleita en la Palabra no le hace falta que le digan que la lea, porque tendrá anhelo de ella. La Biblia tiene riquezas asombrosas para quienes estén dispuestos a dejar que la verdad divina sature sus corazones. Ésta revela al Señor, renueva la mente, aumenta la fe y satisface el alma. Pero si la descuidamos, viviremos como mendigos espirituales, ­siempre con hambre, y nunca satisfechos.
Medite en la Palabra de Dios día y noche. La meditación bíblica es la práctica de dejar que la Palabra empape nuestras almas y cambie nuestras vidas. Consiste en reflexionar acerca de lo que un pasaje en particular le está diciendo; sin buscar información, sino aplicación personal. La meditación es interactiva, porque mientras usted está leyendo y pensando en los versículos, también está hablando con el Señor y haciéndole preguntas. Cuando yo medito en un pasaje, normalmente le pregunto a Dios lo siguiente:
¿Mencionan estos versículos algunas advertencias o cosas que debo evitar?
¿Hay aquí una verdad que necesito entender?
¿Ha prometido Dios algo que todavía no he creído?
¿Hay algunas bendiciones que Dios quiere que yo disfrute?
La clave para meditar en la Biblia es la perseverancia y la paciencia. Hay un tesoro enterrado en la Palabra de Dios, pero quienes escarban solamente la superficie jamás lo encontrarán. Si usted desea tener una vida realmente exitosa, debe hacer que esto se convierta en una práctica regular de su rutina diaria. Leer rápidamente un capítulo cada mañana no avivará un deseo por la Palabra de Dios, ni producirá la transformación que el Señor quiere lograr en su vida.
Las recompensas del éxito
Si usted cuida fielmente sus relaciones con otras personas, y hace que la Palabra de Dios sea la prioridad, podrá esperar resultados maravillosos. Salmo 1.3 describe un cuadro hermoso de la vida cuando la persona ha decidido seguir el camino del Señor.
Un fundamento firme: “Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas”. Si usted sigue los preceptos de Dios, tendrá estabilidad, no importa los problemas que enfrente en la vida. Aunque rujan y azoten los vientos de la tormenta, podrá mantenerse firme porque sus raíces están alimentadas por la corriente eterna de la vida de Cristo que fluye en usted. El mundo y sus placeres no ofrecen nada en comparación con la paz, el gozo y la seguridad de conocer a Jesucristo.
Un fruto abundante: “Será como árbol… que da su fruto en su tiempo y su hoja no cae”. El éxito verdadero no se mide por las cosas sino por el fruto. Cristo dijo a sus discípulos que la única manera como podían ellos dar fruto, era permaneciendo en Él (Jn 15.4). Todos nuestros logros no servirán de nada si no dejamos que Cristo viva a través de nosotros. Cuando su Espíritu que mora en nosotros transforma activamente nuestro carácter y nos prepara para que realicemos lo que Él nos ha llamado a hacer, seremos como árboles que producen una cosecha continua. Solo hay dos opciones en la vida: Podemos vivir para nosotros mismos y producir “tamo que arrebata el viento” (v. 4), o fruto duradero que glorifica a Dios y contribuye al bien de los demás.
Una prosperidad genuina: “Y todo lo que hace, prosperará”. Tenemos que deshacernos de la idea de que la prosperidad es sinónimo de riquezas, prestigio o fama. Estas cosas no son señales verdaderas de éxito desde la perspectiva divina. Lo importante es obedecer la voluntad de Dios, y glorificarlo en todas las cosas.
El Señor le capacitará para que se convierta en una persona verdaderamente exitosa, si se lo permite. Pero debe recordar que hay dos clases diferentes de prosperidad: espiritual y material. La prioridad de Dios es siempre la espiritual. ¿Qué clase de éxito está buscando usted? Está en el buen camino si su amor al Señor y a su Palabra va en aumento, si su carácter es cada vez como el de Jesús, y si su meta en la vida es andar en la voluntad de Dios. Donde sea que se encuentre en ese camino, ya sea al comienzo o en algún punto intermedio, enfóquese en Cristo ­y manténgase caminando con Él.
Autor: Charles Stanley – Ministerios En Contacto.

Jesucristo viene otra vez


Llegará el momento en que los creyentes serán literalmente sacados de este planeta. Serán arrebatados para unirse con su amado Señor Jesucristo. Este evento está predicho en la Biblia.
¡Imposible!, ¡increíble!, ¡qué fantasías!, han dicho muchos incrédulos. Pero el penúltimo versículo de la Biblia dice: “El que da testimonio de estas cosas dice: ‘Ciertamente vengo en breve’. ¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús!” Desde cuando el Espíritu de Dios inspiró estas palabras han pasado veinte siglos.
La gran mayoría de las personas que han vivido desde entonces ya falleció. Aunque el Señor todavía no ha venido, todas esas almas ya están para encontrarse con Él. Los burladores, los “buenos” y los “malos”, todos para dar cuentas. – ¿Cuáles serán las condiciones para ser “recibidos en las moradas eternas”? (Juan 14:2)
Estar preparados
“Pero cuando venga el Hijo del hombre, ¿hallará fe en la tierra?” (Lucas 18:8). ¿Hallará fe en usted, estimado lector? Los siguientes pasos pueden serle útiles para llegar a una fe genuina:
1. Reconózcase pecador que ha merecido el juicio de Dios. “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos (expulsados) de la gloria de Dios” (Romanos 3:23).
2. Admita y acepte que el amor de Dios es tan grande que Él permitió que Su Hijo muriera por usted. “Pero Dios prueba que nos ama en que, cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros” (Romanos 5:8).
3. Confiese sus pecados ante Dios y arregle sus asuntos pendientes con los hombres. Pida perdón. “Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad” (1Juan 1:9).
4.    Confíe usted plenamente en que Dios ya le perdonó y le transformó a usted de “pecador perdido” a “hijo de Dios”. “A todos los que Le recibieron (a Cristo), a los que creen en Su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios” (Juan 1:12).
De ahora en adelante, viva su fe. Agradezca al Señor Jesús cada día que Dios le ha perdonado y que ahora usted tiene la vida eterna. Busque cada día en la Biblia si lo que usted cree u oye acerca de la fe corresponde a cuanto Dios ha revelado. Dedique un momento fijo de su jornada a la oración y a la lectura. Además hable en cualquier momento del día con el Señor para darle gracias y encomendarle todas las preocupaciones. Júntese con otros cristianos en una comunidad donde Jesucristo sea el centro y la Biblia sea anunciada como la palabra de Dios. También declare su fe ante otras personas. No se deje desanimar. Confíe en Jesús y Sus promesas. Espere en cada momento, que el Señor regrese para arrebatar Su iglesia.
Así cuando Él venga, hallará la fe en usted. Una fe que vive el amor de la esposa y clama: “¡Ven!”.

El Sacerdote catolico convertido al Evangelio


Hace algunos años vivía en la importante ciudad de Juiz de Fora en el interior de Brasil, un sacerdote llamado el Padre Hypolyto Campos. Era el vicario de la ciudad y gozaba de gran reputación por su elocuencia y saber.
Siendo un celoso y convencido creyente en la infalibilidad de su Iglesia, se sabía de memoria todos los argumentos jesuíticos contra el protestantismo, y muy hábiles y sutiles son en verdad estos argumentos. ¡Ay del polemista evangélico que se enfrente con un hombre como el Padre Hypolyto si no está absolutamente fundado y asegurado en la Palabra de Dios!
Tal fama le hacía ser muy solicitado en todos los distritos de la diócesis donde los misioneros del Evangelio habían aparecido, y muy a menudo la fecundidad de su palabra le daba la victoria en el aniquilamiento del primer germen de vida plantado junto al camino. Mas no sucedía siempre así porque a veces se encontraba con un hombre o una mujer que había leído la Biblia, que él no había leído y que lo confundía con las más sencillas preguntas, tales como, “¿Dónde se encuentra la enseñanza apostólica acerca del Purgatorio, la Intercesión de los Santos, el Confesionario?” etc.
Notando que la mayoría de estas separatistas eran iletrados y gente humilde, se sentía más perplejo y mortificado y resolvió, por fin, silenciar a tan impertinentes herejes estudiando la Biblia católica para refutarles con ésta.
Decir esto era más fácil que hacerlo. El sabio (¿) Concilio de Trento del Siglo dieciséis sentó el precepto de que ningún sacerdote debe leer las Escrituras, bajo pena de excomunión, sin el consentimiento escrito de su obispo. ¡Tal es el temor de Roma de que sus mismos sacerdotes lean la Biblia!
Es innecesario decir que el sacerdote que se atreve a pedir esta libertad se hace objeto de sospecha y es observado de allí en adelante, y con razón, según veremos más tarde.
El Padre Hypolyto escribió a su obispo exponiéndole lo difícil de su situación y solicitando permiso eclesiástico para leer la Biblia aprobada por “La Santa Iglesia” para confundir a estos herejes.
No recibiendo respuesta del obispo, repitió su petición recibiendo esta vez una negación rotunda. Entonces el Padre Hypolyto urgió del obispo el envío de la Biblia y le expuso las ventajas que se obtendrían, sin inducir, sin embargo, al obispo a hacer más elástica la regla general. Al fin, completamente sublevado y algo indignado, escribió en tales términos al obispo que recibió por el próximo correo una Biblia “aprobada.”
Uno de los métodos inescrupulosos que usa Roma para alejar la Biblia de la gente es declarar que la versión protestante es una versión corrompida y mutilada, Biblias falsas,, las llaman; pero se cuidan muy bien de que “la verdadera Biblia” esté fuera del alcance de la gente, pues la versión más barata es muy cara para los pobres.
Pronto estuvo el Padre Hypolyto sumergido en la lectura de la Biblia de su Iglesia, la cual, como es sabido, se asemeja mucho a la nuestra, con excepción de los pocos libros apócrifos del Antiguo Testamento.
En primer lugar buscó la enseñanza apostólica acerca del purgatorio, esa piedra angular de la superstición romanista; y no fué poco turbado al no hallar mención de él de una cubierta a otra. Algo desconcertado buscó después la confirmación de las otras doctrinas de su Iglesia que habían sido atacadas y una por una recibieron un absoluto silencio o una directa negativa de la Biblia de su propia Iglesia.
Empezó a ver claro que algo erróneo había y que él había sido engañado y había sido convertido en un engañador. Esto atribulaba su conciencia, pero no teniendo completa luz en cuanto a la verdad del Evangelio resolvió permanecer siendo un sacerdote. Poco tiempo después de esto, el Padre Hypolyto visitó una tarde a un amigo y mientras estaba en la casa de éste oyó un canto.
“¿Qué es eso?” inquirió.
“¿Qué no sabes?” repuso el amigo, “son los protestantes. Han alquilado la casa contigua y tienen reuniones regulares, y muchos católicos están asistiendo. Ven, y por una de las ventanas laterales, podrás mirar dentro del salón.” Desde la penumbra de aquel cuarto oscuro el sacerdote pudo contemplar aquella pequeña asamblea.
El himno había cesado, y el misionero dirigió en una oración que afectó de una manera extraña al padre, de tal modo que cuando comenzó el discurso evangelístico no había uno que escuchara con más atención que aquel sacerdote oculto en la casa de su amigo. Al fin del servicio se despidió de su amigo, no sin antes preguntar con cuánta frecuencia se celebraban aquellas reuniones.
La noche de la siguiente reunión, otra vez, como por casualidad, el Padre Hypolyto visitó a su amigo y otra vez escuchó el mensaje del Evangelio desde aquella oscura ventana lateral.
Estas visitas se sucedieron hasta que por fin la convicción se apoderó tan fuertemente del alma del sacerdote que procuró una entrevista con el misionero; y ésta terminó en su definitiva aceptación del Señor Jesucristo como su Salvador y Señor.
Inmediatamente colgó sus hábitos eclesiásticos y envió su renuncia al obispo explicando las razones por las cuales daba este paso. El resultado de ésto fue un terrible revuelto entre la jerarquía católica romana y se pusieron en acción todas las agencias para disuadirle de su resolución. Sacerdotes célebres y bien conocidos estadistas católicos y jesuitas, le asediaban por todas partes con promesas y amenazas alternados hasta que su vida estuvo en peligro. Pero a pesar de todo lo que Roma pudiera hacer él se mantuvo firme en medio de la tormenta sin mirar hacia atrás.
Lejos de la curiosidad pública se dedicó a estudiar las Escrituras. Tres años después fué recibido como predicador local en una misión evangélica y en la actualidad es pastor de una de las más grandes congregaciones de Brasil. Su poderosa predicación convence a todos los que le escuchan de la verdad pura del Evangelio de Jesucristo en contraste con los engaños y falsedades de Roma.
“Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su debido tiempo. . . . Sabed, pues, esto, varones hermanos: que por medio de él se os anuncia perdón de pecados, y que de todo aquello de que por la ley de Moisés no pudisteis ser justificados, en él es justificado todo aquel que cree” (I Timoteo 2:5-6Hechos 13:38-39).

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¿Qué es el islamismo?


No es común que una religión aparezca en los titulares de primera página de los periódicos del día, particularmente en forma regular. Pero durante los últimos 20 años hay una religión que ha ocupado los titulares tal vez más que ninguna otra… la religión del islamismo. El islamismo dice tener hasta mil millones de seguidores en todo el mundo.
No es sólo la religión de crecimiento más rápido en el mundo, sino que su influencia toca prácticamente cada área de la vida-no sólo el área espiritual sino el político y económico también. Más aún, su influencia comienza a sentirse cada vez más cerca de casa. Hay ahora unos 5 millones de musulmanes en los Estados Unidos, y más de 1.100 mezquitas y centros islámicos.
¿Qué enseña el islamismo? ¿En qué se parecen las enseñanzas del islamismo a las del cristianismo? ¿En qué difieren? ¿Cuál debe ser nuestra actitud hacia el islamismo y hacia aquellos que siguen esta religión poderosa? Estas son algunas de las preguntas que queremos abordar en este ensayo.
La Historia del Islamismo
En primer lugar, necesitamos echar una mirada hacia atrás, hacia la historia del islamismo. El islamismo fue fundado a principios del siglo siete por Mahoma. Cuando tenía 40 años de edad, en 610 d.C., Mahoma dijo estar recibiendo mensajes de Dios. Estos mensajes fueron compilados más tarde y registrados en el Corán-el libro sagrado del islamismo.
Por este mismo tiempo, Mahoma comenzó a predicar en contra de la avaricia, la opresión económica y la idolatría que acosaban a los pueblos árabes. Apeló a varias facciones de los pueblos árabes a unirse bajo la adoración a Alá, el principal dios del panteón árabe de deidades. Aunque su mensaje fue rechazado inicialmente, para el año 630 había logrado el control de la Meca, el centro económico y religioso de la península arábica.
Aunque Mahoma murió dos años más tarde, el movimiento político-religioso que fundó se extendió rápidamente por todo el mundo árabe, y mucho más allá. Para 750 d.C., el imperio musulmán abarcaba desde España, al oeste, hasta la India, en el este. En los siglos que siguieron, el islamismo penetró más profundamente hacia África y Asia, llegando tan lejos como las Filipinas. Durante su “edad dorada,” el islamismo ostentaba algunos de los más excelentes filósofos y matemáticos del mundo. Fue también durante este tiempo que el islamismo y el cristianismo chocaron como resultado de las Cruzadas que se llevaron a cabo para reclamar la Tierra Santa a los musulmanes.
Desde el año 1500, aproximadamente, y en forma acelerada después de la revolución industrial de los años 1700-1800, el islamismo sintió la influencia creciente de las potencias europeas. Con el tiempo, grandes porciones del mundo musulmán fueron colonizadas por países europeos. Esta dominación política y económica de Europa continuó hasta el final de la Segunda Guerra Mundial, luego de la cual los países musulmanes comenzaron a lograr la independencia política. Con el descubrimiento y el desarrollo de las vastas reservas de petróleo en tierras musulmanas, de repente la independencia económica estuvo a su alcance también. Por fin, el islamismo tenía al alcance de su mano tanto la oportunidad como los recursos para reafirmarse como una fuerza poderosa en el mundo. ¡Después de haber estado a la defensiva durante muchos siglos, el islamismo tomaba ahora la ofensiva!
El Estado Actual del Islamismo
En este punto deberíamos hablar del estado actual del islamismo. Al hacerlo, es importante darse cuenta que el islamismo no es un sistema monolítico. Si bien todos los musulmanes toman su inspiración de Mahoma y del Corán, pueden identificarse muchos grupos y movimientos dentro del islamismo.
La división más obvia es la que existe entre el islamismo sunita (o sunnita) y chiita. Los sunitas (que componen alrededor del 90% de los musulmanes) toman su nombre del hecho de que se fijan tanto en el Corán como en el “sunna” para determinar la conducta musulmana correcta. El “sunna” es el comportamiento o ejemplo de Mahoma y de la primitiva comunidad musulmana. Por supuesto, hay muchas subdivisiones entre los sunitas, pero todos se identifican como sunitas.
El otro grupo importante de los musulmanes son los chiitas (que forman alrededor del 10% de todos los musulmanes, y residen principalmente en Iraq y en Irán). La palabra chiita significa “partidario,” y se refiere al hecho que los chiitas son “partidarios de Alí.” Alí era el yerno y primo de Mahoma y uno de los primeros califas o sucesores de Mahoma como líder del pueblo musulmán. Los chiitas creen que el líder del islamismo debería estar entre los descendientes de Alí, quienes ellos creen que poseen una unción divina especial para esta tarea. La mayoría de los chiitas cree que el último de estos líderes designados divinamente, o “imanes”, está “oculto” en otro dominio de la existencia. El Ayatollah Khomeini era considerado un vocero de este “imán oculto.”
Un tercer grupo que debería mencionarse son los sufíes-aquellos musulmanes (tanto entre los sunitas como los chiitas) que buscan una experiencia mística con Dios, antes que simplemente un conocimiento intelectual de Él, y que también se entregan a una cantidad de prácticas supersticiosas.
Además de estas divisiones dentro del islamismo, se debe hacer mención también de las actitudes de los musulmanes hacia el contacto con el mundo occidental en los tiempos modernos. Si bien la situación es mucho más compleja de lo que podemos tratar en este artículo, hay dos grandes tendencias que han sido evidentes dentro del islamismo.
Una tendencia es hacia algún grado de acomodamiento y ajuste al occidente y a las formas modernas de vida. Esto se ha manifestado en forma más obvia en países como Turquía, que ha instituido mayormente formas seculares de gobierno mientras conserva prácticas religiosas islámicas.
La tendencia opuesta es hacia un retorno a un enfoque más tradicional de la vida islámica y un rechazo a las formas occidentales y modernas. La expresión más extrema de esta tendencia se manifiesta en varias formas de fundamentalismo islámico que insisten en la implementación de la ley musulmana (llamada la Sharia) en cada área de la vida. Los fundamentalistas han tenido más éxito en Arabia Saudita, Irán, Paquistán y Sudán, pero están activos en prácticamente cada país musulmán, recurriendo a veces a la violencia y al terrorismo al tratar de implementar su programa.
Al entender este potente movimiento religioso y político, es importante entender las diversas divisiones y actitudes dentro del islamismo y las creencias básicas que están en el núcleo del islamismo.
Las Creencias Básicas del Islamismo
Si bien las creencias de los musulmanes en todo el mundo son casi tan diversas como las que hay entre los cristianos, hay seis artículos básicos de fe comunes a casi todos los musulmanes.
El primero de estos es que no hay otro Dios fuera de Alá. Los árabes pre-islámicos eran politeístas. Pero Mahoma logró llevarlos a dedicarse exclusivamente al principal Dios del panteón, que ellos llamaban Alá (que simplemente significa Dios). Adorar o atribuir alguna deidad a otro ser es considerada blasfemia. El Corán menciona numerosos nombres de Alá, y estos nombres se encuentran frecuentemente en los labios de los musulmanes devotos que creen que tienen un poder casi mágico.
El segundo artículo de fe es la creencia en los ángeles y en los jinn. Los jinn son seres espirituales capaces tanto de acciones buenas como malas y de poseer a seres humanos. Por encima de los jinn, en rango, están los ángeles de Dios. Se considera que dos de ellos acompañan a todo musulmán, uno a la derecha para registrar sus buenas obras, y otro a la izquierda para registrar sus malas obras.
El tercer artículo es la creencia en los libros sagrados de Dios, 104 de los cuales son mencionados en el Corán. Los principales entre estos libros son la Ley dada a Moisés, los Salmos dados a David, el Evangelio (o Injil) dado a Jesús y el Corán dado a Mahoma. Se considera que cada uno de estos libros comunicó el mismo mensaje básico de la voluntad de Dios al hombre. Las obvias discrepancias entre las Escrituras judías y cristianas y el Corán (particularmente con referencia a Jesús y Mahoma) fueron explicadas por Mahoma en sugiriendo que la Biblia había sido alterada por los judíos y los cristianos.
El cuarto artículo de fe es la creencia en los profetas de Dios, mediante los cuales Alá apeló al hombre a seguir Su voluntad tal como fue revelada en Sus libros sagrados. No hay ningún acuerdo respecto de cuántos profetas ha habido-algunos dicen cientos de miles. Entre ellos estuvieron Adán, Noé, Abraham, Moisés y Jesús. Pero todos concuerdan en que Mahoma fue el profeta final y supremo de Dios-el “sello” de los profetas. Si bien Mahoma mismo dijo que era un pecador, no obstante hay muchos musulmanes en todo el mundo que parecen estar cerca de adorarlo.
El quinto artículo de fe es la creencia en la voluntad absoluta y predestinadora de Alá. Aun cuando algunos musulmanes han modificado esta doctrina en alguna medida, el Corán parece apoyar la idea de que todas las cosas (tanto buenas como malas) son el resultado directo de la voluntad de Dios. Aquellos que llegan a la conclusión que el islamismo es una religión fatalista tienen buenas razones para hacerlo.
El sexto y último artículo de fe es la creencia en la resurrección y en el juicio final. Al final de la historia, Dios juzgará las obras de todos los hombres. Aquellos cuyas obras buenas pesan más que sus obras malas entrarán en el paraíso (retratado en términos más bien sensuales). El resto será consignado al infierno. El rasgo supremo de la fe islámica, aparte de su fuerte monoteísmo, es que es una religión de obras humanas. La posición de una persona con relación a Ala está determinada por su éxito en guardar Sus leyes.
Las Prácticas Básicas del Islamismo
Ahora queremos enfocarnos en las más importantes de esas obras. Éstas están resumidas en lo que suelen llamarse las “Cinco Columnas del Islamismo.”
La primera columna es la recitación del credo: “No hay más Dios que Alá, y Mahoma es su profeta.” Es una creencia común que recitar este credo en la presencia de dos testigos significa convertirse en musulmán-uno en sumisión a Dios. Por supuesto, la palabra islam significa simplemente “sumisión.”
La segunda columna es la práctica de las oraciones en forma regular. A los musulmanes sunitas se les requiere que reciten oraciones específicas acompañadas por movimientos prescritos cinco veces al día. (Los chiita sólo lo hacen tres veces por día.) A todos los musulmanes varones se les ordena reunirse para una oración comunitaria (y un sermón) cada viernes al mediodía.
La tercera columna es dar limosnas. Al haber nacido él mismo como huérfano, Mahoma estaba profundamente preocupado por los necesitados. El Corán requiere que el 2,5% del ingreso de una persona sea dado a los pobres o para la extensión del islamismo.
La cuarta columna del islamismo es el ayuno durante el mes de Ramadán (el noveno mes lunar del calendario musulmán, durante el cual se dice que Mahoma recibió la primera de sus revelaciones de Dios, y durante el cual él y sus seguidores hicieron su travesía histórica desde la Meca hasta Medina). Durante este mes, a los musulmanes que tengan buena salud se les requiere que renuncien a todo alimento y líquido durante las horas del día. Este ayuno promueve la auto-disciplina del musulmán, la dependencia de Alá y la compasión por los necesitados.
La quinta columna es el Hajj o peregrinaje a la Meca. En lo posible, todo musulmán debe hacer un peregrinaje a la Meca una vez durante su vida. Esto puede hacerse en forma adecuada sólo unos pocos días durante el último mes del año musulmán. El Hajj promueve las ideas de la unidad mundial y la igualdad entre los musulmanes. Pero también contiene muchos elementos de actividad obligatoria que son de origen pagano.
Una sexta columna, la del jihad, es agregada a menudo. (El término significa “esfuerzo” o “lucha” a favor de Dios.) El jihad es el medio por el cual aquellos que están fuera de la familia del islamismo son traídos a su regazo. El jihad puede ser mediante la persuasión, o puede ser mediante la fuerza o “guerra santa.” ¡El hecho que a todo musulmán que muere en una guerra santa se le asegure su lugar en el paraíso provee un fuerte incentivo para la participación!
Los musulmanes en todo el mundo consideran a estas columnas como guías para modelar sus prácticas religiosas. Pero, además de estas columnas, hay numerosas leyes y tradiciones contenidas en el Hadith-la literatura que fue compilada después de completado el Corán, que supuestamente contiene el ejemplo y las declaraciones de Mahoma sobre muchos temas. Como las leyes del Hadith y el Corán cubren prácticamente cada área de la vida, el islamismo ha sido considerado correctamente como una forma de vida que todo lo abarca, además de una religión.
Una Perspectiva Cristiana del Islamismo
A esta altura es adecuado ofrecer una breve evaluación del islamismo desde una perspectiva cristiana.
De entrada, debe decirse que hay mucho en el islamismo que el cristiano puede afirmar. Entre las doctrinas islámicas más significativas que pueden ser afirmadas genuinamente por el cristiano es su creencia en un Dios, su reconocimiento de Jesús como nacido de una virgen, un profeta sin pecado y mesías de Dios, y su expectativa de una resurrección y juicio futuros.
Hay, sin embargo, algunas áreas muy significativas diferentes. Mencionaremos sólo unas pocas. Primero, la percepción musulmán de Dios no es de ninguna forma la misma que la que revela la Biblia. El islamismo retrata a Dios como imposible de conocer en última instancia. De hecho, en el Corán Alá revela Su voluntad, pero nunca se revela a sí mismo. Ni tampoco es retratado jamás como un Dios de amor, ni como un Padre para su pueblo, como es retratado en la Biblia.
Segundo, si bien Jesús es presentado como un profeta hacedor de milagros y un mesías, y aun sin pecado, el islamismo niega que Él es el Hijo de Dios o el Salvador del mundo. Por cierto, se niega el hecho mismo que Jesús haya muerto, y mucho menos por los pecados del mundo.
Tercero, si bien la humanidad es descrita como débil y propensa al error, el islamismo niega que el hombre sea pecador por naturaleza y que necesite un Salvador, como la Biblia enseña tan claramente. Las personas son capaces de someterse a las leyes de Dios y de merecer su aprobación final. Según el islamismo, la necesidad espiritual del hombre no es de un salvador sino de un guía.
Esto conduce al hecho de que, dado que en el islamismo la aceptación por Dios es algo que debemos ganar por nuestras obras, no puede de ninguna forma proveer un sentido de seguridad que puede hallarse en la gracia de Dios, tal como lo enseña la Biblia.
Muchos de nosotros encontraremos oportunidades de hacer amistad con vecinos, compañeros de trabajo o amigos musulmanes. Al hacerlo, debemos estar conscientes de algunas de las barreras que existen entre los musulmanes y los cristianos debido a animosidades del pasado y del presente.
La actitud de muchos musulmanes hacia el cristianismo y hacia el occidente está coloreado por la historia de conflicto que ha encontrado expresión en las Cruzadas de los tiempos de la Edad Media, la dominación europea y el colonialismo, además del apoyo occidental al sionismo en los tiempos más recientes. Debemos permitir que el amor de Dios venza nuestro propio temor y actitud defensiva y penetre estas barreras.
En los últimos años muchos musulmanes han sido impresionados profundamente por la compasión mostrada por los occidentales (y particularmente por los Estados Unidos) hacia países musulmanes que han sobrellevado penurias muy duras. Este tipo de compasión puede ser demostrado en un nivel individual también. Al hacerlo, podemos entonces invitar a nuestros amigos musulmanes a unirse a nosotros para estudiar el Nuevo Testamento, que revela la única fuente de aceptación ante Dios en Su amor y gracia, expresados en Su Hijo Jesucristo y Su don del Espíritu Santo.

¿Qué es el Budismo?


Durante siglos el budismo ha sido la religión dominante en el mundo oriental. Hoy sigue siendo la religión predominante en China, Japón, Corea y gran parte del sudeste de Asia. Con el incremento de la población asiática en los Estados Unidos, el budismo ha hecho un tremendo impacto en los Estados Unidos. Actualmente hay más de 300.000 budistas en los Estados Unidos. Sigue siendo la religión dominante en el estado de Hawai y muchos americanos destacados han aceptado esta religión, incluyendo el ex gobernador de California, Jerrry  Brown .
El Origen del Budismo
El budismo comenzó como una descendencia del hinduismo en la India. El fundador fue Siddhartha Gautama. No es fácil dar un relato histórico preciso de la vida de Gautama, ya que no se registró ninguna biografía hasta cientos de años después de su muerte. Hoy, gran parte de la historia de su vida está envuelta en mitos y leyendas que surgieron después de su muerte. Aun los mejores historiadores de nuestro día tienen varios relatos diferentes-y hasta contradictorios-de la vida de Gautama.
Siddhartha Gautama nació aproximadamente en 560 a.C en el norte de la India. Su padre, Suddhodana, era el gobernador sobre el distrito cerca del Himalaya que hoy es el país de Nepal. Suddhodana resguardó a su hijo del mundo exterior y lo confinó al palacio donde rodeó a Gautama con placeres y riqueza. A pesar de los esfuerzos de su padre, Gautama un día vio el lado más oscuro de la vida en un paseo que dio fuera de las paredes del palacio.
Vio cuatro cosas que cambiaron su vida para siempre: un hombre anciano, un hombre enfermo, un hombre muerto y un mendigo. Profundamente conmovido por el sufrimiento que vio, se decidió a dejar el lujo de la vida de palacio y comenzó una misión para buscar la respuesta al problema del dolor y del sufrimiento humano.
Gautama dejó su familia y viajó por el país buscando sabiduría. Estudió las escrituras hindúes bajo sacerdotes brahmanes, pero se volvió desilusionado con las enseñanzas del hinduismo. Entonces se dedicó a una vida de ascetismo extremo en la selva. La leyenda dice que con el tiempo aprendió a existir con un grano de arroz por día, lo cual redujo su cuerpo a un esqueleto. Pronto llegó a la conclusión, sin embargo, que el ascetismo no conducía a la paz y a la auto-realización sino que simplemente debilitaba la mente y el cuerpo.
Con el tiempo, Gautama se volvió a una vida de meditación. Mientras estaba en meditación profunda bajo una higuera conocida como el árbol de Bohdi (lo que significa “árbol de sabiduría”), Gautama experimentó el grado más alto de conciencia de Dios, llamado Nirvana. Gautama entonces fue conocido como Buda, “el iluminado.” Él creía que había encontrado las respuestas a las preguntas del dolor y el sufrimiento. Su mensaje ahora necesitaba ser proclamado al mundo entero.
Al comenzar su ministerio de enseñanza, pronto consiguió un rápido auditorio entre la gente de la India ya que muchos se habían desilusionado del hinduismo. Para el tiempo de su muerte, a los 80 años, el budismo se había convertido en una fuerza importante en la India. Tres siglos más tarde, se había extendido a toda Asia. Buda nunca dijo ser una deidad sino más bien un “indicador del camino.” Sin embargo, setecientos años más tarde, los seguidores de Buda comenzaron a adorarlo como una deidad.
El Camino de Salvación
La pregunta que Gautama, el fundador del budismo, buscaba contestar era ¿Por qué hay dolor y sufrimiento? Él también sostenía la creencia hindú en la reencarnación: después de la muerte una vuelve a la vida terrenal en una forma de vida superior o inferior según sus obras buenas o malas. Esta creencia promovía una segunda pregunta que necesitaba ser contestada, ¿Cómo rompe uno el ciclo de renacimiento? Las enseñanzas básicas del budismo, por lo tanto, se concentran en lo que Gautama consideraba era la respuesta a estas preguntas. Estas doctrinas básicas se encuentran en las Cuatro Nobles Verdades y el Camino de Ocho Partes. Comencemos con las Cuatro Nobles Verdades.
La Primera Noble Verdad es que hay dolor y sufrimiento en el mundo. Gautama se dio cuenta que el dolor y el sufrimiento son omnipresentes en toda la naturaleza y la vida humana. Existir significa que vamos a encontrarnos con el sufrimiento. El nacimiento es doloroso, y también lo es la muerte. La enfermedad y la vejez son dolorosas. A lo largo de la vida, todas las cosas vivas encuentran sufrimiento.
La Segunda Noble Verdad se relaciona con la causa del sufrimiento. Gautama creía que la raíz del sufrimiento es el deseo. Es la avidez por la riqueza, la felicidad y otras formas de disfrute egoísta la que causa el sufrimiento. Esta avidez nunca puede ser satisfecha porque está arraigada en la ignorancia.
La Tercera Noble Verdad es el final de todo sufrimiento. El sufrimiento cesará cuando una persona puede liberarse de todo deseo.
La Cuarta Noble Verdad es la extinción de todo deseo siguiendo el camino de ocho partes. “El camino de ocho partes es un sistema de terapia diseñado para desarrollar hábitos que liberarán a las personas de las restricciones causadas por la ignorancia y la avidez.”
Aquí están los ocho pasos a seguir en el camino de ocho partes. El primer paso es el de las Perspectivas Correctas. Uno debe aceptar las cuatro nobles verdades. El paso dos es la Determinación Correcta. Uno debe renunciar a todos los deseos y a todo pensamiento que se asemeje a la lujuria, amargura y crueldad. No debe dañar a ninguna criatura viviente. El paso tres es la Palabra Correcta. Uno debe hablar sólo verdad. No puede haber ninguna mentira, calumnia o conversación vana. El paso cuatro es el Comportamiento Correcto. Uno debe abstenerse de la inmoralidad sexual, de robar y de matar.
El paso cinco es la Ocupación Correcta. Uno debe trabajar en una ocupación que beneficie a otros y que no dañe a nadie. El paso seis es el Esfuerzo Correcto. Uno debe buscar eliminar toda cualidad malvada de adentro y evitar que surjan nuevas. Uno debería buscar conseguir cualidades buenas y morales y desarrollar las que ya posee. Buscar crecer en madurez y perfección hasta lograr el amor universal. El paso siete es la Contemplación Correcta. Uno debe ser observador, contemplativo y debe estar libre del deseo y de la aflicción. El octavo, es la Meditación Correcta. Luego de liberarse uno mismo de todos los deseos y de la maldad, una persona debe concentrar sus esfuerzos en la meditación para que pueda vencer cualquier sensación de placer o dolor, entrar en un estado de consciencia trascendente y lograr un estado de perfección. Los budistas creen que mediante el esfuerzo propio uno puede lograr el estado de paz y dicha eterna llamado Nirvana.
Karma, Samsara y Nirvana
Tres conceptos importantes para entender el budismo son karma, Samsara y Nirvana.
El karma se refiere a la ley de causa y efecto en la vida de una persona, cosechando lo que uno ha sembrado. Los budistas creen que toda persona debe pasar por un proceso de nacimiento y renacimiento hasta que llega al estado de Nirvana en donde rompe el ciclo. Según la ley del karma, “Tú eres lo que eres y lo que haces, como resultado de lo que fuiste e hiciste en una reencarnación anterior, lo cual a su vez fue el resultado inevitable de lo que fuiste e hiciste en encarnaciones aun anteriores.” Para un budista, lo que una persona será en la próxima vida depende de las acciones de esa persona en esta vida presente. Buda creía, a diferencia del hinduismo, que una persona puede romper el ciclo de renacimiento, no importa la clase en que haya nacido.
El segundo concepto clave a entender es la ley de Samsara o de Transmigración. Este es uno de los conceptos más desconcertantes y difíciles de comprender del budismo. La ley de Samsara sostiene que todo está en un ciclo de nacimiento y renacimiento. Buda enseñaba que las personas no tienen almas individuales. La existencia de un yo individual, o ego, es una ilusión. No hay ninguna sustancia eterna de una persona que pasa por el ciclo de renacimiento. ¿Qué es, entonces, lo que pasa por el ciclo si no es el alma individual? Lo que pasa por el ciclo de renacimiento es sólo un conjunto de sensaciones, impresiones, momentos presentes, y el karma que es transmitido. “En otras palabras, así como un proceso conduce a otro, … así también una personalidad humana en una existencia es la causa directa del tipo de individualidad que aparece en la próxima.” El nuevo individuo en la próxima vida no será exactamente la misma persona, pero habrá varias similitudes. Cuán próximos serán en sus identidades, Buda no lo definió.
El tercer concepto clave es el Nirvana. El término significa “la extinción” de la existencia. El Nirvana es muy diferente del concepto cristiano del cielo. El Nirvana no un lugar, como el cielo, sino más bien un estado del ser. Qué es exactamente, Buda nunca lo explicó.
El Nirvana es un estado eterno del ser. Es el estado en que la ley del karma y el ciclo de renacimiento llegan a su fin. Es el fin del sufrimiento, un estado donde no hay deseos y la conciencia individual llega a su fin. Aunque a nuestras mentes occidentales pueda sonar como el aniquilamiento, los budistas objetarían tal idea. Gautama nunca dio una descripción exacta del Nirvana, pero su respuesta más cercana fue esta. “Hay, discípulos, una condición donde no hay ni tierra ni agua, ni aire ni luz, ni espacio sin límites, ni tiempo sin límites, ni ningún tipo de ser, ni ideas ni falta de ideas, ni este mundo ni aquel mundo. No hay ni un levantarse ni un fenecer, ni muerte, ni causa ni efecto, ni cambio, ni detenimiento.” Si bien ningún budista realmente entiende la condición de Nirvana, es su esperanza eterna.
Dios y el Budismo
Se le puede haber ocurrido al lector que en nuestra discusión hasta ahora no se ha hecho ninguna mención de Dios o de una deidad eterna. Está claro que Gautama, el fundador del budismo, no decía que era divino. Él decía ser el que indicaba el camino hacia el Nirvana, pero dependía de cada individuo encontrar su camino hacia allá.
El concepto de un Dios personal no encaja en el sistema budista de religión. Hoy hay muchas sectas budistas. Muchas difieren en su concepto de lo divino y de Buda. En general, los budistas son panteístas en su perspectiva de Dios. Muchos ven a Dios como una fuerza impersonal que está formado por todas las cosas vivas y que mantiene unido al universo.
Esto es lo que dicen algunos de los eruditos más destacados acerca de la perspectiva budista de Dios. El Dr. John Noss declara, “no hay ninguna Persona soberana en los cielos manteniendo todo unido. Sólo existe la unidad personal última del ser mismo, cuya paz envuelve al yo individual cuando deja de llamarse “yo” y se disuelve en la pureza anodina del Nirvana, como una gota de rocío se incorpora a su mar maternal.”
Esto es lo que el ya fallecido Dr. Suzuki, uno de los más grandes maestros del budismo Zen, dice acerca de su concepto de Dios: “Si Dios, después de hacer el mundo se coloca fuera de él, ya no es Dios. Si se separa del mundo o quiere separarse, no es Dios. El mundo no es el mundo cuando está separado de Dios. Dios debe estar en el mundo y el mundo en Dios.”
Dado que el budismo en general no cree en un Dios personal o en un ser divino, no tiene adoración, oración o alabanza de un ser divino. No ofrece ninguna forma de redención, perdón, esperanza celestial o juicio final. El budismo es, por lo tanto, más una filosofía moral, un camino de vida ético.
El profesor Kraemer describe al sistema budista como “una disciplina ética no teísta, un sistema de auto-entrenamiento, antropocéntrico, enfatizando la ética y la cultura de la mente y excluyendo a la religión.”
Desde la muerte de Gautama, se han desarrollado muchas sectas dentro del budismo. Muchas de estas sectas difieren en muchas formas fundamentales, y comparar una con otra es como comparar dos religiones separadas. Muchas sectas han desarrollado su propio concepto único de Dios. Algunas son panteístas en su perspectiva de Dios. Otras son ateas. Todavía otras han desarrollado un sistema politeísta de dioses. Algunas han combinado el panteísmo con el politeísmo. Varias sectas han elevado a Gautama (o Buda) al nivel de salvador o ser divino, aunque está claro que él nunca dijo ser una deidad. Otras sectas han combinado algunas de las doctrinas de Dios de otras religiones con el budismo.
Dado que Buda nunca enfatizó su concepto de lo divino, el budismo se queda con varias de las preguntas más profundas de la vida sin responder, preguntas tales como el origen del universo y el propósito de la existencia del hombre.
Un Estudio Comparativo del Cristianismo y el Budismo
Está bastante claro que el cristianismo y el budismo difieren entre sí en formas fundamentales. Algunas sectas del budismo han tratado de sincronizar a ambos. Sin embargo, los dos son tan distintos que no pueden ser correctos ambos a la vez, ni pueden ambos mezclarse juntos. Aquí va la comparación de estas dos religiones.
Muchas de las escrituras y dichos budistas atribuidos a Gautama fueron escritos unos cuatrocientos años después de su muerte. Para cuando se escribieron, el budismo se había dividido en muchas sectas. ¿Qué es lo que tenemos, entonces? Ni siquiera los mejores eruditos están seguros de la exactitud de las escrituras budistas. En el cristianismo, sin embargo, tenemos un relato histórico preciso escrito por testigos que vieron a Jesús y los eventos que rodearon Su vida.
Ambos difieren en su concepto de Dios. Para los budistas, en general, el Absoluto no juega un papel vital en la vida diaria. Gautama dijo poco acerca de su concepto de Dios. Buda negaba la existencia de un Dios personal, pero era monista en su perspectiva del Absoluto como una fuerza impersonal formada por todas las cosas vivas. La Biblia enseña de un Dios que gobierna el universo y cuida del hombre en una forma personal. Salmos 46:10 declara, “Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.”
Está claro que Buda nunca dijo ser una deidad. Si bien varias sectas lo han elevado a la categoría de un dios, él dijo claramente que sólo era un indicador del camino al Nirvana. Jesús, sin embargo, dijo ser Dios y no simplemente un indicador de camino, sino el único camino a la vida eterna. Jesús dijo en Juan 14:6, “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” Juan 1:1 también dice, “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.”
Hay otra clara distinción entre estas dos religiones. El budismo no ofrece ni la seguridad del perdón ni la vida eterna. Los budistas esperan entrar en un estado de Nirvana, pero no hay ninguna prueba clara y objetiva o alguna enseñanza sobre lo que ocurre más allá de la tumba. Aun Buda mismo no estaba seguro de lo que había más allá de la muerte. No dejó ninguna enseñanza clara sobre el Nirvana o la eternidad. Lo que dejó son especulaciones filosóficas. Hoy el cuerpo de Buda yace en una tumba en Kusinara, al pie del Himalaya. Los hechos de la vida después de la muerte todavía permanecen como un misterio no resuelto en el budismo.
En el cristianismo tenemos a Uno que asombró a Su audiencia porque enseñaba verdades eternas con autoridad. Su autoridad venía del hecho que existió antes de la creación, y probó sus afirmaciones al levantarse de los muertos. La Resurrección de Jesucristo es un hecho probado de la historia y demuestra claramente la autoridad de Cristo sobre el pecado y la muerte. Cuando testificas a un budista, pregúntale esto: “¿Tienes pruebas tangibles de lo que ocurre después de la muerte?” Todo lo que tiene el budista es la esperanza en una enseñanza acerca de la cual no estaba seguro Buda. Como cristianos, tenemos una esperanza cierta en un Salvador resucitado. No hay que adivinar qué pasa más allá de la tumba porque sólo Cristo ha conquistado la tumba.

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Biografia de Nicky Cruz



Reverendo Nicky Cruz (nacido el 6 de diciembre 1938 en San Juan, Puerto Rico) fue el líder de la pandilla de Nueva York llamada Los Mau-Mau. Luego se convertió en uno de los ministros religiosos mundiales más conocidos.
Cruz fue criado por sus padres, los cuales practicaban brujería y espiritismo. Ellos lo atormentaban mentalmente diciéndole cosas como “Hijo de Satanás.” El barrio donde él vivía era uno de los peores en Puerto Rico y Nicky siempre se estaba metiendo en problemas.
Vida en la pandilla
En el 1 de enero de 1955 — cuando Nicky tenía 16 años — sus padres lo mandaron a vivir con su hermano mayor en Nueva York. Se mudó a Fort Greene, Brooklyn a un complejo de vivienda con más de 30,000 habitantes puertorriqueños y afroamericanos. En los guetos de Nueva York, como Fort Greene, la vida es muy difícil, y unirse a una pandilla era una de las pocas opciones que los adolescentes tenían para poder sobrevivir.
En poco tiempo Nicky se hizo líder militar de la pandilla. Este puesto era importante porque es el que se reúne con sus pares de otras pandillas para discutir detalles sobre las peleas, por ejemplo la hora y cuáles armas serán utilizadas. Para el 1958, Nicky ya era el “presidente” de la pandilla, la cual se dedicaba a robos y homicidios. El joven también estaba involucrado con drogas y su compañero Mannie Durango murió en sus manos en una pelea entre pandillas.

Conversión
El Reverendo David Wilkerson estuvo en el vecindario de Nicky predicando cuando Nicky se encontró con él. Hablaron hasta que Nicky lo amenazó con la muerte. Luego por la tarde el señor Wilkerson dio la vuelta por la base de la pandilla de Nicky donde el joven se calló a golpes.
Dos semanas después, el Reverendo volvió al barrio para una reunión envagélica. Cuando el joven Nicky se enteró dicidió que iba a asaltar a Wilkerson de nuevo, esta vez con otros miembros de su pandilla.
La reunión se estaba llevando a cabo en el “St. Nicholas Boxing Arena” y ahí era donde Nicky iba a ir. Según Nicky, cuando llegó, algo extraño le pasó a su cuerpo. Empezó a sentirse culpable por los acontecimientos y se puso a orar. Wilkerson oró con Nicky y el joven le pidió a Dios que le perdonara. También le pidió el perdón del reverendo.
El siguiente día el joven se entregó a la policía con todas su armas. Rápidamente comenzó a estudiar la Biblia y se matriculó en la escuela. Estudió varios temas, incluyendo a la teología. Luego se convertió en un predicador y volvió a su barrio de niñez, donde le predicó a los otros miembros de su pandilla para que aceptaran a Jesucristo como su salvador. Hasta el nuevo líder Israel Narvaez lo aceptó cuando Nicky los visitó.

Ministerio
Nicky es el encabezado de “Nicky Cruz Outreach” un programa con el propósito de proveer ayuda para los adolescentes con problemas en la vida. El programa ha tenido mucho éxito y tiene sucursales en EEUU, América Latina y Europa. También fundó varios centros de rehabilitación para los drogadictos. Es miembro del Comité Honorario de The Presidential Prayer Team el cual incluye personas como Gerald Ford, Jerry Colangelo entre otros.

Literatura
En 1970 se editó una película sobre la vida de Nicky Cruz titulada The Cross and the Switchblade la cual incluye Pat Boone como El Reverendo David Wilkerson y Erik Estrada como Nicky Cruz. En febrero del 2000, una especial de televisión sobre Nicky Cruz fue titulada Run Baby, Run fue presentada en EEUU.
Nicky también hizo un documental de 55 minutos con Art Linkletter llamdo “No Need to Hide”. Nicky llevó Art a varios sitios vigilados por su pandilla.
Los siguientes libros sobre la vida de Nicky Cruz han sido editados en varios idiomas: “The Cross and the Switchblade”, de David Wilkerson, “Run, Baby, Run,” de Nicky Cruz, and “The Gangster Who Cried: The story of Nicky Cruz”, de R.J. Owens. Tambié fue co-autor del libro, “The Magnificent Three”, con Charles Paul Conn.

Biografia de Kenneth Copeland

En mayo de 1967, Kenneth Copeland caminaba a orillas del río Arkansas en Tulsa, Oklahoma, cuando el Señor depositó la visión del ministerio en su corazón—predicar el Evangelio a las naciones. Un llamado que incluiría usar toda voz disponible para predicar el mensaje fe sin comprometer su integridad, con el fin de satisfacer las necesidades de la gente en todo el mundo. 

Todo comenzó, sin embargo, con pasos simples de obediencia y fe, caminando en el amor y en la integridad de la Palabra de Dios. 

En 1957, a los 20 años, con el éxito discográfico Pledge of Love, colocado en el lugar #14 en las listas de popularidad nacional y el #1 en las locales, Kenneth parecía estar encaminado hacia una exitosa carrera como cantante, especialmente después de aparecer en el programa American Bandstand y junto a Ricky Nelson en la revista Dig Magazine. Pero Dios tenía otros planes. Conoció a Gloria y le propuso matrimonio en la primera cita. Ella aceptó. En ese tiempo, vivían en un apartamento alquilado, tenían una cama plegable sobre ruedas y una cafetera en la que cocinaban. Ellos dejaban los alimentos afuera, al frente de su casa para mantenerlos fríos. No tenían abundancia de nada. Pero un día, mientras Gloria leía una Biblia que la madre de Kenneth le había regalado a su hijo, ella oró:«Dios, toma mi vida y haz algo con ella». Al poco tiempo Kenneth se convirtió, y cinco años después, en la primavera de 1967, cuando tenía 30 años, obedeció a Dios. Él y su familia empacaron y se mudaron a Tulsa, Oklahoma, para ingresar a la Universidad Oral Roberts. 

Kenneth llenó una solicitud para trabajar como copiloto de Oral Roberts y lo contrataron como parte de la tripulación de vuelo que iba a todas las reuniones en carpas y campañas. Fue en ese tiempo que aprendió a pasos agigantados, en un entrenamiento sobre la marcha. A los pocos meses de estar trabajando para Oral, Kenneth recibió el llamado de Dios para comenzar su propio ministerio, y así fue como el 7 de septiembre de 1967 nacieron los Ministerios Kenneth Copeland. 

«Los Ministerios Kenneth Copeland nacieron del amor por la gente y de un compromiso de llevar la Palabra a la gente», dice Kenneth Copeland.«Nuestras vidas están completamente dedicadas a ministrar a la gente. Cuando decimos: "Estamos aquí para usted", queremos decir hasta el punto que: todo lo que hacemos, todo lo que predicamos, todo programa de televisión donde nos presentamos, todo lugar donde ministramos y todo lo que decimos y hacemos ha sido orado, cuidadosamente planeado y diseñado para ministrar a la gente. Dios nos llamó para llevar al mundo entero su mensaje de amor y de fe. Usted es importante para nosotros y queremos ayudarlo a encontrar en la Palabra de Dios las respuestas que necesita».

Kellie Copeland, hija de Kenneth y Gloria, cree que esto es lo que distingue a Kenneth y Gloria.«La gente usa todo el tiempo frases como "iglesia de la Palabra", "gente de la Palabra", "movimiento de la Palabra", dice Kellie. Hace cuarenta años la fe era algo ambiguo. No era un movimiento. Para nosotros era simplemente un estilo de vida. Mamá y papá decían: "Si está en la Palabra, viviremos de acuerdo a lo que nos enseña. Cambiaremos nuestra vida para que se ajuste a la Palabra". Esa es la forma como vivimos nuestra vida. Toda decisión que ellos toman está basada en la Palabra».

«La integridad y la integridad en la Palabra de Dios», añade John Copeland, hijo y Director Ejecutivo de los Ministerios Kenneth Copeland. «Son los cimientos en los que ha permanecido este ministerio durante 40 años y seguirá permaneciendo los próximos 40 años. La gente dice que la palabra de fe nos enseña que nunca más tendremos problemas, pero esto no es cierto. Nuestras familias han enfrentado adversidades. En ocasiones solo atravesamos dificultades. No es el hecho de que no enfrentemos obstáculos o no enfrentemos adversidades, sino lo que hacemos cuando estamos de frente a esas adversidades. ¿Cómo se maneja usted? ¿Qué hace usted? Usted puede elegir. Ellos nos enseñaron a no aceptar lo que venga, sino a luchar, a estar firmes en contra de ello, a creerle a Dios y a la integridad de Su Palabra, y eso nos llevará al otro lado».

Kenneth y Gloria aprendieron el principio de relacionarse con Dios mediante la fe. Gracias a la bendición del Señor ellos han enseñado a sus hijos, a sus nietos y a los socios de su ministerio alrededor del mundo acerca del poder de relacionarse con Dios y con Su Palabra todos los días y en todos los aspectos de sus vidas, haciendo de ello una gran herencia y un patrimonio.

Esa herencia continúa para la gloria de Dios.

BIOGRAFIA de Cash Luna

Conocido familiarmente como Cash porque cuando era niño decía que se llamaba "Cash-los", recibió a Jesús como Señor y Salvador en 1982, siendo aún joven. Desde entonces, comenzó a servirle apasionadamente, predicando en parques, calles y buses. En esa misma época inició sus estudios en la universidad privada Francisco Marroquín en la ciudad de Guatemala. Obtuvo, con honores Cum Laude, una Licenciatura en Administración de Sistemas de Información. Durante su época de estudiante contrajo matrimonio con Sonia, quien le dio tres preciosos hijos: Carlos Enrique, Juan Diego y Ana Gabriela y además, lo ha apoyado fielmente en su ministerio.

Se dedicaba exitosamente a sus negocios personales cuando fue llamado por Dios para servirle a tiempo completo. Una noche, su esposa y él  sintieron tan fuerte la presencia del Señor que el peso del Espíritu Santo los hundía en la cama. Desde ese día, los milagros y prodigios le siguen a dondequiera y está convencido con todo su corazón que no es su presencia, sino la del Espíritu Santo la que toca a las personas.

En 1994, el Señor los llamó a pastorear y de esa forma nace Casa de Dios,  la congregación que hoy preside y que se conoce por la manifestación de la presencia del Señor. Siendo ésta aún muy pequeña, la gloria de Dios los visitó dejando como ebrios en el Espíritu a muchos de los presentes, tal y como ocurrió el día de Pentecostés. Hoy es una de las iglesias más grandes e influyentes de Latinoamérica. Su cobertura abarca múltiples servicios que se realizan en un auditórium propio construido con el esfuerzo de todos.

Ese mismo año inició unas reuniones nocturnas de unción abiertas al público en general. Se denominaron Noches de Gloria por la impresionante manifestación de la presencia y del poder del Espíritu Santo. Éstas se han desarrollado en cruzadas de sanidad y milagros que se llevan a cabo en muchos países hispanoamericanos. Simultáneo a las cruzadas nació el programa diario de televisión que transmite dichas reuniones y las prédicas de la iglesia. 

Los pastores Cash y Sonia son reconocidos por su ministerio apostólico al Cuerpo de Cristo, el cual se manifiesta en el pastoreo de ministros, la renovación de cientos de iglesias locales y la bendición a cristianos en muchos países. Su principal objetivo como ministro ha sido desarrollar discípulos dentro y fuera de la iglesia, a través de la Palabra de Dios y la unción del Espíritu Santo, provocando un fuerte crecimiento en el equipo de trabajo y en el ministerio.

Los pastores Luna tienen como objetivo puesto por Dios, ver Su gloria manifestarse en el mundo entero a través de la unción y  su visión es alcanzar las multitudes para Cristo.

Biografia de Joyce Meyer



Joyce Meyer, es una de las maestras bíblicas más prácticas del mundo. Reconocida por el periódico New York Times como la autora de mejor ventas, sus libros ayudan a millones de personas a encontrar esperanza y restauración a través de Jesucristo.

A través de los Ministerios Joyce Meyer, ella enseña cientos de temas, ha escrito más de 80 libros y realiza aproximadamente 15 conferencias por año.  Hasta la fecha más de 12 millones de sus libros se han distribuido alrededor del mundo y en el año 2007 se vendieron mas de 3.2 millones de copias. Joyce también tiene programas de radio y televisión; Disfrutando la Vida Diaria, con una audiencia de 3 billones personas.

A pesar de haber sufrido abuso sexual de niña y el dolor del abuso emocional de su primer matrimonio, Joyce descubrió la libertad de vivir victoriosamente aplicando la Palabra de Dios en su vida y a cambio desea ayudar a otros hacer lo mismo.  Desde su batalla con el cáncer del ceno hasta los retos diarios que trae la vida, ella habla de manera practica y abiertamente acerca de sus experiencias para que otros puedan aplicar en sus vidas lo que ella ha aprendido.

A través de los años, Dios le ha proveído a Joyce con muchas oportunidades de compartir su testimonio y el mensaje del Evangelio que transforma vidas.  De hecho, la revista Time la eligió como una de las lideres evangélicas mas influyentes en Norteamérica.  Ella es un testimonio increíble del trabajo dinámico y redentor de Jesucristo. Ella cree y enseña que a pesar del pasado o errores de una persona, Dios tiene un plan para ellos y puede ayudarlos en su camino a disfrutar la vida diaria.

Joyce tiene un doctorado en teología de la Universidad Life Christian en Tampa, Florida; dos doctorados honorarios, uno en divinidad de la Universidad Oral Roberts en Tulsa, Oklahoma y el otro en teología sagrada de la universidad Grand Canyon en Phoenix, Arizona.  Joyce y su esposo Dave han estado casados por más de cuarenta años y son los padres de cuatro adultos. Dave y Joyce residen en St. Louis, Missouri. 

BIOGRAFIA - CARLOS ANNACONDIA



Carlos Alberto Annacondia; Nació en 12 de Marzo de 1944, en la ciudad de Quilmes, Provincia de Buenos Aires. En 1970 contrajo matrimonio con María Luján Revagliatti. En la actualidad son padres de Carlos, María Eugenia, Ángel, José María, Rebeca, Moisés, Elías, Ruth y Natanael. 8 de sus hijos están ya casados, y tienen 14 nietos. Conoció al Señor el 19 de Mayo de 1979 de San Justo, provincia de Buenos, en una Cruzada Evangelística con el Rev. Manuel A. Ruiz, de Panamá. Siendo un prospero hombre de negocios, Dios lo llamó y lo levantó como Evangelista de Su Reino, y como tal, ejerce su ministerio desde el año 1981. Comenzó su ministerio predicando en la década de '80 en las villas de emergencia del Gran Buenos Aires. Su mensaje ha sido oído por multitudes de personas de distintas razas y condiciones sociales, de los cinco Continentes. Se estima que varios millones de personas tomaron la decisión por el Señor Jesucristo en sus Cruzadas. Actualmente vive en la Ciudad de Buenos Aires y preside el Equipo "Misión Cristiana Mensaje de Salvación", de la Unión de las Asambleas de Dios y es miembro de una Iglesia en Buenos Aire

Evangélicos brasileños crecen un 61 por ciento en 10 años dice censo


Evangélicos brasileños crecen un 61 por ciento en 10 años dice censo
Brasilia.- Un total de 42 millones 300 mil brasileños, dijeron ser evangélicos en el 2010, un 61,45 por ciento más que los 26 millones 200 mil existentes en el 2000, dice datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
La cantidad de evangélicos en el 2000 representaba el 15,4 por ciento de la población brasileña y los de 2010, corresponden al 22,2 por ciento de los habitantes del gigante suramericano, indica el IBGE.

En 1991 los evangélicos abarcaban solo el nueve por ciento de la población y en 1980, sólo el 6,6 por ciento.
Pese a ese incremento, los católicos siguen siendo mayoría en Brasil, religión que profesan 123 millones 300 mil personas en 2010, lo que representa un 64,6 por ciento de los cerca de 191 millones de habitantes del país, un 1,3 por ciento menos que en 2000, cuando eran 124 millones 900 mil, el 73,6 por ciento de la población.
Sin embargo, el IBGE dice que los que se declaran sin religión subieron del 4,7 % al 8,0 % de los encuestados, lo que equivale a cerca de 15 millones de personas, según los cálculos del IBGE.
Ese grupo engloba a una gran mayoría de personas sin una religión definida y también a 615.096 ateos y 124.436 agnósticos.
Un 2,0 % de los brasileños profesa la religión espiritista y un 0,3 % es fiel de credos de origen africano como el candomblé o el umbanda.
Fuente: ABC, Prensa Latina y InfoBae.

José Luis de Jesús Miranda queda en ridículo tras no cumplirse su profecía


José Luis de Jesús Miranda queda en ridículo tras no cumplirse su profecía
El día 30 de junio, los fieles de la Iglesia Creciendo en Gracia dijeron: “¡El día ha llegado!”, para que se transformara el cuerpo de Miranda en inmortal pero no ocurrió.
La profecía del “Jesucristo hombre” no se cumplió. Una vez más José Luis de Jesús Miranda quedó en ridículo igual como le ocurrió a Harold Camping el año pasado quien en dos ocasiones fechó el fin del mundo.
El día 30 de junio, los fieles de la Iglesia Creciendo en Gracia dijeron: “¡El día ha llegado!”, para se transformara el cuerpo de Miranda en inmortal pero no ocurrió, tampoco se cumplió que dos tercios de la humanidad morirían y que el Vaticano sería destruido y que sólo los fieles a Miranda sobrevivían.

En los últimos días la propaganda de Miranda sobre la supuesta transformación fue anunciada en el centro de la capital de Puerto Rico mostrando una imagen del ser religioso llamado el señor y citando un versículo de Hebreos.
En la red social de Twitter, muchos internautas se burlaron de Miranda y cuestionaron la falsa profecía, diciendo que todos sus amigos estaban vivos o habían visto a “Jesucristo hombre” atravesar paredes con su cuerpo transformado.
El pasado sábado 30 de junio, en Honduras, miles de personas, entre hombres, mujeres, niños y ancianos, en todo el país, salieron a la calles a manifestarse, muchos de ellos iban marcados con el número de la bestia, “666”, a la espera de transformarse en inmortales y poder vivir para siempre, según informó el diario La Tribuna.
Los líderes de las iglesias evangélicas y católicas recomendaron a la población no creer en falsos profetas, que son lobos vestidos de ovejas, ya que el regreso de Jesucristo no está calendarizado y nadie conoce cuándo ocurrirá.
Foto: La Tribuna.: Según los miembros de la secta Creciendo en Gracia, las religiones Católica y Protestante desaparecerán y darán paso al nuevo dios, Jesús Miranda.
Traducido y adaptado por NoticiaCristiana.com de Gospel Prime y con información del diario La Tribuna de Honduras.

Caminar por la senda estrecha


Cuando su vida haya terminado, y esté delante del Creador para rendir cuenta de cómo vivió, ¿qué le dirá? ¿Que trabajó duro, que tuvo una casa hermosa, y que llevaba a su familia a tomar vacaciones maravillosas? ¿O que le sirvió sin demora y obedientemente, tratando de ser como Jesús en todo lo que decía y hacía?
Después que muramos, todos nuestros logros serán puestos delante del Señor para ser evaluados. En ese momento, no importará cuántos elogios haya usted recibido, ni qué tan lejos llegó en su profesión, ni cuánto dinero acumuló. Lo único que importará será lo que Dios piense en cuanto a cómo usó usted sus talentos, dones y oportunidades que Él le dio.
La Biblia está llena de sabios consejos que, si se ponen en práctica, pueden llevar a la prosperidad terrenal. Sin embargo, lo importante es si su deseo principal es seguir al Señor o lograr la prosperidad terrenal. Cuando alguien se dedica a Cristo y anda en obediencia a Él sin importar las consecuencias, puede tener éxito tanto en el mundo como a los ojos de Dios.
Los primeros pasos
El Salmo 1 brinda una descripción de cómo caminar por la senda estrecha del éxito según Dios, siguiendo ciertos principios bíblicos diariamente. Usted puede comenzar a practicarlos ahora mismo, con la ayuda del Espíritu Santo.
Tenga cuidado con sus relaciones: El primer versículo del salmo tiene que ver con las relaciones, y recomienda evitar tres cosas si queremos agradar a Dios.
No ande en consejo de malos. Nunca seremos verdaderamente exitosos si buscamos la dirección de quienes no conocen al Señor. Esto se aplica a todos los aspectos de la vida: los negocios, las finanzas, las relaciones, y todo lo demás. El título impresionante de alguien o su amplia experiencia, no son ninguna garantía de que su consejo sea bueno. Incluso, debemos tener cuidado en cuanto a aceptar la guía de otros cristianos, porque no todos los creyentes son espiritualmente maduros y sabios. Su consejo puede ser, en realidad, más carnal que espiritual. La única manera de proteger nuestro caminar, es comparar todo consejo que recibamos, con lo que dice la Biblia. Si hay alguna contradicción, ignore ese consejo, porque no le conducirá donde el Señor quiere que vaya.
No ande en camino de pecadores. Aunque es posible que tenga que vivir o trabajar con quienes están en un mal camino, usted no tiene que participar en sus prácticas. Cuando los demás le inciten a transigir y a hacer lo que usted sabe que está mal, no tenga temor de estar solo en el camino de Dios. Estamos llamados a ser luz del mundo, no a mezclarnos con sus tinieblas. El Señor nos pone en medio de incrédulos, para que puedan ver al Salvador en nosotros (Mt 5.14-16). Si Dios quiere prosperarlo en su lugar de trabajo, Él lo hará a su propia manera y en su tiempo.
No se siente en silla de escarnecedores. Si usted se está preguntando quiénes son los escarnecedores, simplemente prenda su televisor. El mundo está lleno de personas que se burlan de Dios, de su pueblo, y de su Palabra. Atacan con un lenguaje grosero, o descalifican con su razonamiento intelectual. Los creyentes nunca deben sentirse a gusto entre ellos. A pesar de que estamos llamados a ser testigos de Cristo en un mundo perdido, es prudente que tracemos líneas de protección para no ser influenciados negativamente o engañados.
Conságrese a la Palabra de Dios:  El Salmo 1.1 menciona las cosas que no deben hacerse­, pero el versículo 2 nos dice qué prácticas positivas debemos incorporar a nuestras vidas para poder realmente tener éxito.
Deléitese en la ley de Dios. A la persona que se deleita en la Palabra no le hace falta que le digan que la lea, porque tendrá anhelo de ella. La Biblia tiene riquezas asombrosas para quienes estén dispuestos a dejar que la verdad divina sature sus corazones. Ésta revela al Señor, renueva la mente, aumenta la fe y satisface el alma. Pero si la descuidamos, viviremos como mendigos espirituales, ­siempre con hambre, y nunca satisfechos.
Medite en la Palabra de Dios día y noche. La meditación bíblica es la práctica de dejar que la Palabra empape nuestras almas y cambie nuestras vidas. Consiste en reflexionar acerca de lo que un pasaje en particular le está diciendo; sin buscar información, sino aplicación personal. La meditación es interactiva, porque mientras usted está leyendo y pensando en los versículos, también está hablando con el Señor y haciéndole preguntas. Cuando yo medito en un pasaje, normalmente le pregunto a Dios lo siguiente:
¿Mencionan estos versículos algunas advertencias o cosas que debo evitar?
¿Hay aquí una verdad que necesito entender?
¿Ha prometido Dios algo que todavía no he creído?
¿Hay algunas bendiciones que Dios quiere que yo disfrute?
La clave para meditar en la Biblia es la perseverancia y la paciencia. Hay un tesoro enterrado en la Palabra de Dios, pero quienes escarban solamente la superficie jamás lo encontrarán. Si usted desea tener una vida realmente exitosa, debe hacer que esto se convierta en una práctica regular de su rutina diaria. Leer rápidamente un capítulo cada mañana no avivará un deseo por la Palabra de Dios, ni producirá la transformación que el Señor quiere lograr en su vida.
Las recompensas del éxito
Si usted cuida fielmente sus relaciones con otras personas, y hace que la Palabra de Dios sea la prioridad, podrá esperar resultados maravillosos. Salmo 1.3 describe un cuadro hermoso de la vida cuando la persona ha decidido seguir el camino del Señor.
Un fundamento firme: “Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas”. Si usted sigue los preceptos de Dios, tendrá estabilidad, no importa los problemas que enfrente en la vida. Aunque rujan y azoten los vientos de la tormenta, podrá mantenerse firme porque sus raíces están alimentadas por la corriente eterna de la vida de Cristo que fluye en usted. El mundo y sus placeres no ofrecen nada en comparación con la paz, el gozo y la seguridad de conocer a Jesucristo.
Un fruto abundante: “Será como árbol… que da su fruto en su tiempo y su hoja no cae”. El éxito verdadero no se mide por las cosas sino por el fruto. Cristo dijo a sus discípulos que la única manera como podían ellos dar fruto, era permaneciendo en Él (Jn 15.4). Todos nuestros logros no servirán de nada si no dejamos que Cristo viva a través de nosotros. Cuando su Espíritu que mora en nosotros transforma activamente nuestro carácter y nos prepara para que realicemos lo que Él nos ha llamado a hacer, seremos como árboles que producen una cosecha continua. Solo hay dos opciones en la vida: Podemos vivir para nosotros mismos y producir “tamo que arrebata el viento” (v. 4), o fruto duradero que glorifica a Dios y contribuye al bien de los demás.
Una prosperidad genuina: “Y todo lo que hace, prosperará”. Tenemos que deshacernos de la idea de que la prosperidad es sinónimo de riquezas, prestigio o fama. Estas cosas no son señales verdaderas de éxito desde la perspectiva divina. Lo importante es obedecer la voluntad de Dios, y glorificarlo en todas las cosas.
El Señor le capacitará para que se convierta en una persona verdaderamente exitosa, si se lo permite. Pero debe recordar que hay dos clases diferentes de prosperidad: espiritual y material. La prioridad de Dios es siempre la espiritual. ¿Qué clase de éxito está buscando usted? Está en el buen camino si su amor al Señor y a su Palabra va en aumento, si su carácter es cada vez como el de Jesús, y si su meta en la vida es andar en la voluntad de Dios. Donde sea que se encuentre en ese camino, ya sea al comienzo o en algún punto intermedio, enfóquese en Cristo ­y manténgase caminando con Él.
Autor: Charles Stanley – Ministerios En Contacto.

Jesucristo viene otra vez


Llegará el momento en que los creyentes serán literalmente sacados de este planeta. Serán arrebatados para unirse con su amado Señor Jesucristo. Este evento está predicho en la Biblia.
¡Imposible!, ¡increíble!, ¡qué fantasías!, han dicho muchos incrédulos. Pero el penúltimo versículo de la Biblia dice: “El que da testimonio de estas cosas dice: ‘Ciertamente vengo en breve’. ¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús!” Desde cuando el Espíritu de Dios inspiró estas palabras han pasado veinte siglos.
La gran mayoría de las personas que han vivido desde entonces ya falleció. Aunque el Señor todavía no ha venido, todas esas almas ya están para encontrarse con Él. Los burladores, los “buenos” y los “malos”, todos para dar cuentas. – ¿Cuáles serán las condiciones para ser “recibidos en las moradas eternas”? (Juan 14:2)
Estar preparados
“Pero cuando venga el Hijo del hombre, ¿hallará fe en la tierra?” (Lucas 18:8). ¿Hallará fe en usted, estimado lector? Los siguientes pasos pueden serle útiles para llegar a una fe genuina:
1. Reconózcase pecador que ha merecido el juicio de Dios. “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos (expulsados) de la gloria de Dios” (Romanos 3:23).
2. Admita y acepte que el amor de Dios es tan grande que Él permitió que Su Hijo muriera por usted. “Pero Dios prueba que nos ama en que, cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros” (Romanos 5:8).
3. Confiese sus pecados ante Dios y arregle sus asuntos pendientes con los hombres. Pida perdón. “Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad” (1Juan 1:9).
4.    Confíe usted plenamente en que Dios ya le perdonó y le transformó a usted de “pecador perdido” a “hijo de Dios”. “A todos los que Le recibieron (a Cristo), a los que creen en Su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios” (Juan 1:12).
De ahora en adelante, viva su fe. Agradezca al Señor Jesús cada día que Dios le ha perdonado y que ahora usted tiene la vida eterna. Busque cada día en la Biblia si lo que usted cree u oye acerca de la fe corresponde a cuanto Dios ha revelado. Dedique un momento fijo de su jornada a la oración y a la lectura. Además hable en cualquier momento del día con el Señor para darle gracias y encomendarle todas las preocupaciones. Júntese con otros cristianos en una comunidad donde Jesucristo sea el centro y la Biblia sea anunciada como la palabra de Dios. También declare su fe ante otras personas. No se deje desanimar. Confíe en Jesús y Sus promesas. Espere en cada momento, que el Señor regrese para arrebatar Su iglesia.
Así cuando Él venga, hallará la fe en usted. Una fe que vive el amor de la esposa y clama: “¡Ven!”.

El Sacerdote catolico convertido al Evangelio


Hace algunos años vivía en la importante ciudad de Juiz de Fora en el interior de Brasil, un sacerdote llamado el Padre Hypolyto Campos. Era el vicario de la ciudad y gozaba de gran reputación por su elocuencia y saber.
Siendo un celoso y convencido creyente en la infalibilidad de su Iglesia, se sabía de memoria todos los argumentos jesuíticos contra el protestantismo, y muy hábiles y sutiles son en verdad estos argumentos. ¡Ay del polemista evangélico que se enfrente con un hombre como el Padre Hypolyto si no está absolutamente fundado y asegurado en la Palabra de Dios!
Tal fama le hacía ser muy solicitado en todos los distritos de la diócesis donde los misioneros del Evangelio habían aparecido, y muy a menudo la fecundidad de su palabra le daba la victoria en el aniquilamiento del primer germen de vida plantado junto al camino. Mas no sucedía siempre así porque a veces se encontraba con un hombre o una mujer que había leído la Biblia, que él no había leído y que lo confundía con las más sencillas preguntas, tales como, “¿Dónde se encuentra la enseñanza apostólica acerca del Purgatorio, la Intercesión de los Santos, el Confesionario?” etc.
Notando que la mayoría de estas separatistas eran iletrados y gente humilde, se sentía más perplejo y mortificado y resolvió, por fin, silenciar a tan impertinentes herejes estudiando la Biblia católica para refutarles con ésta.
Decir esto era más fácil que hacerlo. El sabio (¿) Concilio de Trento del Siglo dieciséis sentó el precepto de que ningún sacerdote debe leer las Escrituras, bajo pena de excomunión, sin el consentimiento escrito de su obispo. ¡Tal es el temor de Roma de que sus mismos sacerdotes lean la Biblia!
Es innecesario decir que el sacerdote que se atreve a pedir esta libertad se hace objeto de sospecha y es observado de allí en adelante, y con razón, según veremos más tarde.
El Padre Hypolyto escribió a su obispo exponiéndole lo difícil de su situación y solicitando permiso eclesiástico para leer la Biblia aprobada por “La Santa Iglesia” para confundir a estos herejes.
No recibiendo respuesta del obispo, repitió su petición recibiendo esta vez una negación rotunda. Entonces el Padre Hypolyto urgió del obispo el envío de la Biblia y le expuso las ventajas que se obtendrían, sin inducir, sin embargo, al obispo a hacer más elástica la regla general. Al fin, completamente sublevado y algo indignado, escribió en tales términos al obispo que recibió por el próximo correo una Biblia “aprobada.”
Uno de los métodos inescrupulosos que usa Roma para alejar la Biblia de la gente es declarar que la versión protestante es una versión corrompida y mutilada, Biblias falsas,, las llaman; pero se cuidan muy bien de que “la verdadera Biblia” esté fuera del alcance de la gente, pues la versión más barata es muy cara para los pobres.
Pronto estuvo el Padre Hypolyto sumergido en la lectura de la Biblia de su Iglesia, la cual, como es sabido, se asemeja mucho a la nuestra, con excepción de los pocos libros apócrifos del Antiguo Testamento.
En primer lugar buscó la enseñanza apostólica acerca del purgatorio, esa piedra angular de la superstición romanista; y no fué poco turbado al no hallar mención de él de una cubierta a otra. Algo desconcertado buscó después la confirmación de las otras doctrinas de su Iglesia que habían sido atacadas y una por una recibieron un absoluto silencio o una directa negativa de la Biblia de su propia Iglesia.
Empezó a ver claro que algo erróneo había y que él había sido engañado y había sido convertido en un engañador. Esto atribulaba su conciencia, pero no teniendo completa luz en cuanto a la verdad del Evangelio resolvió permanecer siendo un sacerdote. Poco tiempo después de esto, el Padre Hypolyto visitó una tarde a un amigo y mientras estaba en la casa de éste oyó un canto.
“¿Qué es eso?” inquirió.
“¿Qué no sabes?” repuso el amigo, “son los protestantes. Han alquilado la casa contigua y tienen reuniones regulares, y muchos católicos están asistiendo. Ven, y por una de las ventanas laterales, podrás mirar dentro del salón.” Desde la penumbra de aquel cuarto oscuro el sacerdote pudo contemplar aquella pequeña asamblea.
El himno había cesado, y el misionero dirigió en una oración que afectó de una manera extraña al padre, de tal modo que cuando comenzó el discurso evangelístico no había uno que escuchara con más atención que aquel sacerdote oculto en la casa de su amigo. Al fin del servicio se despidió de su amigo, no sin antes preguntar con cuánta frecuencia se celebraban aquellas reuniones.
La noche de la siguiente reunión, otra vez, como por casualidad, el Padre Hypolyto visitó a su amigo y otra vez escuchó el mensaje del Evangelio desde aquella oscura ventana lateral.
Estas visitas se sucedieron hasta que por fin la convicción se apoderó tan fuertemente del alma del sacerdote que procuró una entrevista con el misionero; y ésta terminó en su definitiva aceptación del Señor Jesucristo como su Salvador y Señor.
Inmediatamente colgó sus hábitos eclesiásticos y envió su renuncia al obispo explicando las razones por las cuales daba este paso. El resultado de ésto fue un terrible revuelto entre la jerarquía católica romana y se pusieron en acción todas las agencias para disuadirle de su resolución. Sacerdotes célebres y bien conocidos estadistas católicos y jesuitas, le asediaban por todas partes con promesas y amenazas alternados hasta que su vida estuvo en peligro. Pero a pesar de todo lo que Roma pudiera hacer él se mantuvo firme en medio de la tormenta sin mirar hacia atrás.
Lejos de la curiosidad pública se dedicó a estudiar las Escrituras. Tres años después fué recibido como predicador local en una misión evangélica y en la actualidad es pastor de una de las más grandes congregaciones de Brasil. Su poderosa predicación convence a todos los que le escuchan de la verdad pura del Evangelio de Jesucristo en contraste con los engaños y falsedades de Roma.
“Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su debido tiempo. . . . Sabed, pues, esto, varones hermanos: que por medio de él se os anuncia perdón de pecados, y que de todo aquello de que por la ley de Moisés no pudisteis ser justificados, en él es justificado todo aquel que cree” (I Timoteo 2:5-6Hechos 13:38-39).

GOSPEL TRACT DISTRIBUTORS

¿Qué es el islamismo?


No es común que una religión aparezca en los titulares de primera página de los periódicos del día, particularmente en forma regular. Pero durante los últimos 20 años hay una religión que ha ocupado los titulares tal vez más que ninguna otra… la religión del islamismo. El islamismo dice tener hasta mil millones de seguidores en todo el mundo.
No es sólo la religión de crecimiento más rápido en el mundo, sino que su influencia toca prácticamente cada área de la vida-no sólo el área espiritual sino el político y económico también. Más aún, su influencia comienza a sentirse cada vez más cerca de casa. Hay ahora unos 5 millones de musulmanes en los Estados Unidos, y más de 1.100 mezquitas y centros islámicos.
¿Qué enseña el islamismo? ¿En qué se parecen las enseñanzas del islamismo a las del cristianismo? ¿En qué difieren? ¿Cuál debe ser nuestra actitud hacia el islamismo y hacia aquellos que siguen esta religión poderosa? Estas son algunas de las preguntas que queremos abordar en este ensayo.
La Historia del Islamismo
En primer lugar, necesitamos echar una mirada hacia atrás, hacia la historia del islamismo. El islamismo fue fundado a principios del siglo siete por Mahoma. Cuando tenía 40 años de edad, en 610 d.C., Mahoma dijo estar recibiendo mensajes de Dios. Estos mensajes fueron compilados más tarde y registrados en el Corán-el libro sagrado del islamismo.
Por este mismo tiempo, Mahoma comenzó a predicar en contra de la avaricia, la opresión económica y la idolatría que acosaban a los pueblos árabes. Apeló a varias facciones de los pueblos árabes a unirse bajo la adoración a Alá, el principal dios del panteón árabe de deidades. Aunque su mensaje fue rechazado inicialmente, para el año 630 había logrado el control de la Meca, el centro económico y religioso de la península arábica.
Aunque Mahoma murió dos años más tarde, el movimiento político-religioso que fundó se extendió rápidamente por todo el mundo árabe, y mucho más allá. Para 750 d.C., el imperio musulmán abarcaba desde España, al oeste, hasta la India, en el este. En los siglos que siguieron, el islamismo penetró más profundamente hacia África y Asia, llegando tan lejos como las Filipinas. Durante su “edad dorada,” el islamismo ostentaba algunos de los más excelentes filósofos y matemáticos del mundo. Fue también durante este tiempo que el islamismo y el cristianismo chocaron como resultado de las Cruzadas que se llevaron a cabo para reclamar la Tierra Santa a los musulmanes.
Desde el año 1500, aproximadamente, y en forma acelerada después de la revolución industrial de los años 1700-1800, el islamismo sintió la influencia creciente de las potencias europeas. Con el tiempo, grandes porciones del mundo musulmán fueron colonizadas por países europeos. Esta dominación política y económica de Europa continuó hasta el final de la Segunda Guerra Mundial, luego de la cual los países musulmanes comenzaron a lograr la independencia política. Con el descubrimiento y el desarrollo de las vastas reservas de petróleo en tierras musulmanas, de repente la independencia económica estuvo a su alcance también. Por fin, el islamismo tenía al alcance de su mano tanto la oportunidad como los recursos para reafirmarse como una fuerza poderosa en el mundo. ¡Después de haber estado a la defensiva durante muchos siglos, el islamismo tomaba ahora la ofensiva!
El Estado Actual del Islamismo
En este punto deberíamos hablar del estado actual del islamismo. Al hacerlo, es importante darse cuenta que el islamismo no es un sistema monolítico. Si bien todos los musulmanes toman su inspiración de Mahoma y del Corán, pueden identificarse muchos grupos y movimientos dentro del islamismo.
La división más obvia es la que existe entre el islamismo sunita (o sunnita) y chiita. Los sunitas (que componen alrededor del 90% de los musulmanes) toman su nombre del hecho de que se fijan tanto en el Corán como en el “sunna” para determinar la conducta musulmana correcta. El “sunna” es el comportamiento o ejemplo de Mahoma y de la primitiva comunidad musulmana. Por supuesto, hay muchas subdivisiones entre los sunitas, pero todos se identifican como sunitas.
El otro grupo importante de los musulmanes son los chiitas (que forman alrededor del 10% de todos los musulmanes, y residen principalmente en Iraq y en Irán). La palabra chiita significa “partidario,” y se refiere al hecho que los chiitas son “partidarios de Alí.” Alí era el yerno y primo de Mahoma y uno de los primeros califas o sucesores de Mahoma como líder del pueblo musulmán. Los chiitas creen que el líder del islamismo debería estar entre los descendientes de Alí, quienes ellos creen que poseen una unción divina especial para esta tarea. La mayoría de los chiitas cree que el último de estos líderes designados divinamente, o “imanes”, está “oculto” en otro dominio de la existencia. El Ayatollah Khomeini era considerado un vocero de este “imán oculto.”
Un tercer grupo que debería mencionarse son los sufíes-aquellos musulmanes (tanto entre los sunitas como los chiitas) que buscan una experiencia mística con Dios, antes que simplemente un conocimiento intelectual de Él, y que también se entregan a una cantidad de prácticas supersticiosas.
Además de estas divisiones dentro del islamismo, se debe hacer mención también de las actitudes de los musulmanes hacia el contacto con el mundo occidental en los tiempos modernos. Si bien la situación es mucho más compleja de lo que podemos tratar en este artículo, hay dos grandes tendencias que han sido evidentes dentro del islamismo.
Una tendencia es hacia algún grado de acomodamiento y ajuste al occidente y a las formas modernas de vida. Esto se ha manifestado en forma más obvia en países como Turquía, que ha instituido mayormente formas seculares de gobierno mientras conserva prácticas religiosas islámicas.
La tendencia opuesta es hacia un retorno a un enfoque más tradicional de la vida islámica y un rechazo a las formas occidentales y modernas. La expresión más extrema de esta tendencia se manifiesta en varias formas de fundamentalismo islámico que insisten en la implementación de la ley musulmana (llamada la Sharia) en cada área de la vida. Los fundamentalistas han tenido más éxito en Arabia Saudita, Irán, Paquistán y Sudán, pero están activos en prácticamente cada país musulmán, recurriendo a veces a la violencia y al terrorismo al tratar de implementar su programa.
Al entender este potente movimiento religioso y político, es importante entender las diversas divisiones y actitudes dentro del islamismo y las creencias básicas que están en el núcleo del islamismo.
Las Creencias Básicas del Islamismo
Si bien las creencias de los musulmanes en todo el mundo son casi tan diversas como las que hay entre los cristianos, hay seis artículos básicos de fe comunes a casi todos los musulmanes.
El primero de estos es que no hay otro Dios fuera de Alá. Los árabes pre-islámicos eran politeístas. Pero Mahoma logró llevarlos a dedicarse exclusivamente al principal Dios del panteón, que ellos llamaban Alá (que simplemente significa Dios). Adorar o atribuir alguna deidad a otro ser es considerada blasfemia. El Corán menciona numerosos nombres de Alá, y estos nombres se encuentran frecuentemente en los labios de los musulmanes devotos que creen que tienen un poder casi mágico.
El segundo artículo de fe es la creencia en los ángeles y en los jinn. Los jinn son seres espirituales capaces tanto de acciones buenas como malas y de poseer a seres humanos. Por encima de los jinn, en rango, están los ángeles de Dios. Se considera que dos de ellos acompañan a todo musulmán, uno a la derecha para registrar sus buenas obras, y otro a la izquierda para registrar sus malas obras.
El tercer artículo es la creencia en los libros sagrados de Dios, 104 de los cuales son mencionados en el Corán. Los principales entre estos libros son la Ley dada a Moisés, los Salmos dados a David, el Evangelio (o Injil) dado a Jesús y el Corán dado a Mahoma. Se considera que cada uno de estos libros comunicó el mismo mensaje básico de la voluntad de Dios al hombre. Las obvias discrepancias entre las Escrituras judías y cristianas y el Corán (particularmente con referencia a Jesús y Mahoma) fueron explicadas por Mahoma en sugiriendo que la Biblia había sido alterada por los judíos y los cristianos.
El cuarto artículo de fe es la creencia en los profetas de Dios, mediante los cuales Alá apeló al hombre a seguir Su voluntad tal como fue revelada en Sus libros sagrados. No hay ningún acuerdo respecto de cuántos profetas ha habido-algunos dicen cientos de miles. Entre ellos estuvieron Adán, Noé, Abraham, Moisés y Jesús. Pero todos concuerdan en que Mahoma fue el profeta final y supremo de Dios-el “sello” de los profetas. Si bien Mahoma mismo dijo que era un pecador, no obstante hay muchos musulmanes en todo el mundo que parecen estar cerca de adorarlo.
El quinto artículo de fe es la creencia en la voluntad absoluta y predestinadora de Alá. Aun cuando algunos musulmanes han modificado esta doctrina en alguna medida, el Corán parece apoyar la idea de que todas las cosas (tanto buenas como malas) son el resultado directo de la voluntad de Dios. Aquellos que llegan a la conclusión que el islamismo es una religión fatalista tienen buenas razones para hacerlo.
El sexto y último artículo de fe es la creencia en la resurrección y en el juicio final. Al final de la historia, Dios juzgará las obras de todos los hombres. Aquellos cuyas obras buenas pesan más que sus obras malas entrarán en el paraíso (retratado en términos más bien sensuales). El resto será consignado al infierno. El rasgo supremo de la fe islámica, aparte de su fuerte monoteísmo, es que es una religión de obras humanas. La posición de una persona con relación a Ala está determinada por su éxito en guardar Sus leyes.
Las Prácticas Básicas del Islamismo
Ahora queremos enfocarnos en las más importantes de esas obras. Éstas están resumidas en lo que suelen llamarse las “Cinco Columnas del Islamismo.”
La primera columna es la recitación del credo: “No hay más Dios que Alá, y Mahoma es su profeta.” Es una creencia común que recitar este credo en la presencia de dos testigos significa convertirse en musulmán-uno en sumisión a Dios. Por supuesto, la palabra islam significa simplemente “sumisión.”
La segunda columna es la práctica de las oraciones en forma regular. A los musulmanes sunitas se les requiere que reciten oraciones específicas acompañadas por movimientos prescritos cinco veces al día. (Los chiita sólo lo hacen tres veces por día.) A todos los musulmanes varones se les ordena reunirse para una oración comunitaria (y un sermón) cada viernes al mediodía.
La tercera columna es dar limosnas. Al haber nacido él mismo como huérfano, Mahoma estaba profundamente preocupado por los necesitados. El Corán requiere que el 2,5% del ingreso de una persona sea dado a los pobres o para la extensión del islamismo.
La cuarta columna del islamismo es el ayuno durante el mes de Ramadán (el noveno mes lunar del calendario musulmán, durante el cual se dice que Mahoma recibió la primera de sus revelaciones de Dios, y durante el cual él y sus seguidores hicieron su travesía histórica desde la Meca hasta Medina). Durante este mes, a los musulmanes que tengan buena salud se les requiere que renuncien a todo alimento y líquido durante las horas del día. Este ayuno promueve la auto-disciplina del musulmán, la dependencia de Alá y la compasión por los necesitados.
La quinta columna es el Hajj o peregrinaje a la Meca. En lo posible, todo musulmán debe hacer un peregrinaje a la Meca una vez durante su vida. Esto puede hacerse en forma adecuada sólo unos pocos días durante el último mes del año musulmán. El Hajj promueve las ideas de la unidad mundial y la igualdad entre los musulmanes. Pero también contiene muchos elementos de actividad obligatoria que son de origen pagano.
Una sexta columna, la del jihad, es agregada a menudo. (El término significa “esfuerzo” o “lucha” a favor de Dios.) El jihad es el medio por el cual aquellos que están fuera de la familia del islamismo son traídos a su regazo. El jihad puede ser mediante la persuasión, o puede ser mediante la fuerza o “guerra santa.” ¡El hecho que a todo musulmán que muere en una guerra santa se le asegure su lugar en el paraíso provee un fuerte incentivo para la participación!
Los musulmanes en todo el mundo consideran a estas columnas como guías para modelar sus prácticas religiosas. Pero, además de estas columnas, hay numerosas leyes y tradiciones contenidas en el Hadith-la literatura que fue compilada después de completado el Corán, que supuestamente contiene el ejemplo y las declaraciones de Mahoma sobre muchos temas. Como las leyes del Hadith y el Corán cubren prácticamente cada área de la vida, el islamismo ha sido considerado correctamente como una forma de vida que todo lo abarca, además de una religión.
Una Perspectiva Cristiana del Islamismo
A esta altura es adecuado ofrecer una breve evaluación del islamismo desde una perspectiva cristiana.
De entrada, debe decirse que hay mucho en el islamismo que el cristiano puede afirmar. Entre las doctrinas islámicas más significativas que pueden ser afirmadas genuinamente por el cristiano es su creencia en un Dios, su reconocimiento de Jesús como nacido de una virgen, un profeta sin pecado y mesías de Dios, y su expectativa de una resurrección y juicio futuros.
Hay, sin embargo, algunas áreas muy significativas diferentes. Mencionaremos sólo unas pocas. Primero, la percepción musulmán de Dios no es de ninguna forma la misma que la que revela la Biblia. El islamismo retrata a Dios como imposible de conocer en última instancia. De hecho, en el Corán Alá revela Su voluntad, pero nunca se revela a sí mismo. Ni tampoco es retratado jamás como un Dios de amor, ni como un Padre para su pueblo, como es retratado en la Biblia.
Segundo, si bien Jesús es presentado como un profeta hacedor de milagros y un mesías, y aun sin pecado, el islamismo niega que Él es el Hijo de Dios o el Salvador del mundo. Por cierto, se niega el hecho mismo que Jesús haya muerto, y mucho menos por los pecados del mundo.
Tercero, si bien la humanidad es descrita como débil y propensa al error, el islamismo niega que el hombre sea pecador por naturaleza y que necesite un Salvador, como la Biblia enseña tan claramente. Las personas son capaces de someterse a las leyes de Dios y de merecer su aprobación final. Según el islamismo, la necesidad espiritual del hombre no es de un salvador sino de un guía.
Esto conduce al hecho de que, dado que en el islamismo la aceptación por Dios es algo que debemos ganar por nuestras obras, no puede de ninguna forma proveer un sentido de seguridad que puede hallarse en la gracia de Dios, tal como lo enseña la Biblia.
Muchos de nosotros encontraremos oportunidades de hacer amistad con vecinos, compañeros de trabajo o amigos musulmanes. Al hacerlo, debemos estar conscientes de algunas de las barreras que existen entre los musulmanes y los cristianos debido a animosidades del pasado y del presente.
La actitud de muchos musulmanes hacia el cristianismo y hacia el occidente está coloreado por la historia de conflicto que ha encontrado expresión en las Cruzadas de los tiempos de la Edad Media, la dominación europea y el colonialismo, además del apoyo occidental al sionismo en los tiempos más recientes. Debemos permitir que el amor de Dios venza nuestro propio temor y actitud defensiva y penetre estas barreras.
En los últimos años muchos musulmanes han sido impresionados profundamente por la compasión mostrada por los occidentales (y particularmente por los Estados Unidos) hacia países musulmanes que han sobrellevado penurias muy duras. Este tipo de compasión puede ser demostrado en un nivel individual también. Al hacerlo, podemos entonces invitar a nuestros amigos musulmanes a unirse a nosotros para estudiar el Nuevo Testamento, que revela la única fuente de aceptación ante Dios en Su amor y gracia, expresados en Su Hijo Jesucristo y Su don del Espíritu Santo.

¿Qué es el Budismo?


Durante siglos el budismo ha sido la religión dominante en el mundo oriental. Hoy sigue siendo la religión predominante en China, Japón, Corea y gran parte del sudeste de Asia. Con el incremento de la población asiática en los Estados Unidos, el budismo ha hecho un tremendo impacto en los Estados Unidos. Actualmente hay más de 300.000 budistas en los Estados Unidos. Sigue siendo la religión dominante en el estado de Hawai y muchos americanos destacados han aceptado esta religión, incluyendo el ex gobernador de California, Jerrry  Brown .
El Origen del Budismo
El budismo comenzó como una descendencia del hinduismo en la India. El fundador fue Siddhartha Gautama. No es fácil dar un relato histórico preciso de la vida de Gautama, ya que no se registró ninguna biografía hasta cientos de años después de su muerte. Hoy, gran parte de la historia de su vida está envuelta en mitos y leyendas que surgieron después de su muerte. Aun los mejores historiadores de nuestro día tienen varios relatos diferentes-y hasta contradictorios-de la vida de Gautama.
Siddhartha Gautama nació aproximadamente en 560 a.C en el norte de la India. Su padre, Suddhodana, era el gobernador sobre el distrito cerca del Himalaya que hoy es el país de Nepal. Suddhodana resguardó a su hijo del mundo exterior y lo confinó al palacio donde rodeó a Gautama con placeres y riqueza. A pesar de los esfuerzos de su padre, Gautama un día vio el lado más oscuro de la vida en un paseo que dio fuera de las paredes del palacio.
Vio cuatro cosas que cambiaron su vida para siempre: un hombre anciano, un hombre enfermo, un hombre muerto y un mendigo. Profundamente conmovido por el sufrimiento que vio, se decidió a dejar el lujo de la vida de palacio y comenzó una misión para buscar la respuesta al problema del dolor y del sufrimiento humano.
Gautama dejó su familia y viajó por el país buscando sabiduría. Estudió las escrituras hindúes bajo sacerdotes brahmanes, pero se volvió desilusionado con las enseñanzas del hinduismo. Entonces se dedicó a una vida de ascetismo extremo en la selva. La leyenda dice que con el tiempo aprendió a existir con un grano de arroz por día, lo cual redujo su cuerpo a un esqueleto. Pronto llegó a la conclusión, sin embargo, que el ascetismo no conducía a la paz y a la auto-realización sino que simplemente debilitaba la mente y el cuerpo.
Con el tiempo, Gautama se volvió a una vida de meditación. Mientras estaba en meditación profunda bajo una higuera conocida como el árbol de Bohdi (lo que significa “árbol de sabiduría”), Gautama experimentó el grado más alto de conciencia de Dios, llamado Nirvana. Gautama entonces fue conocido como Buda, “el iluminado.” Él creía que había encontrado las respuestas a las preguntas del dolor y el sufrimiento. Su mensaje ahora necesitaba ser proclamado al mundo entero.
Al comenzar su ministerio de enseñanza, pronto consiguió un rápido auditorio entre la gente de la India ya que muchos se habían desilusionado del hinduismo. Para el tiempo de su muerte, a los 80 años, el budismo se había convertido en una fuerza importante en la India. Tres siglos más tarde, se había extendido a toda Asia. Buda nunca dijo ser una deidad sino más bien un “indicador del camino.” Sin embargo, setecientos años más tarde, los seguidores de Buda comenzaron a adorarlo como una deidad.
El Camino de Salvación
La pregunta que Gautama, el fundador del budismo, buscaba contestar era ¿Por qué hay dolor y sufrimiento? Él también sostenía la creencia hindú en la reencarnación: después de la muerte una vuelve a la vida terrenal en una forma de vida superior o inferior según sus obras buenas o malas. Esta creencia promovía una segunda pregunta que necesitaba ser contestada, ¿Cómo rompe uno el ciclo de renacimiento? Las enseñanzas básicas del budismo, por lo tanto, se concentran en lo que Gautama consideraba era la respuesta a estas preguntas. Estas doctrinas básicas se encuentran en las Cuatro Nobles Verdades y el Camino de Ocho Partes. Comencemos con las Cuatro Nobles Verdades.
La Primera Noble Verdad es que hay dolor y sufrimiento en el mundo. Gautama se dio cuenta que el dolor y el sufrimiento son omnipresentes en toda la naturaleza y la vida humana. Existir significa que vamos a encontrarnos con el sufrimiento. El nacimiento es doloroso, y también lo es la muerte. La enfermedad y la vejez son dolorosas. A lo largo de la vida, todas las cosas vivas encuentran sufrimiento.
La Segunda Noble Verdad se relaciona con la causa del sufrimiento. Gautama creía que la raíz del sufrimiento es el deseo. Es la avidez por la riqueza, la felicidad y otras formas de disfrute egoísta la que causa el sufrimiento. Esta avidez nunca puede ser satisfecha porque está arraigada en la ignorancia.
La Tercera Noble Verdad es el final de todo sufrimiento. El sufrimiento cesará cuando una persona puede liberarse de todo deseo.
La Cuarta Noble Verdad es la extinción de todo deseo siguiendo el camino de ocho partes. “El camino de ocho partes es un sistema de terapia diseñado para desarrollar hábitos que liberarán a las personas de las restricciones causadas por la ignorancia y la avidez.”
Aquí están los ocho pasos a seguir en el camino de ocho partes. El primer paso es el de las Perspectivas Correctas. Uno debe aceptar las cuatro nobles verdades. El paso dos es la Determinación Correcta. Uno debe renunciar a todos los deseos y a todo pensamiento que se asemeje a la lujuria, amargura y crueldad. No debe dañar a ninguna criatura viviente. El paso tres es la Palabra Correcta. Uno debe hablar sólo verdad. No puede haber ninguna mentira, calumnia o conversación vana. El paso cuatro es el Comportamiento Correcto. Uno debe abstenerse de la inmoralidad sexual, de robar y de matar.
El paso cinco es la Ocupación Correcta. Uno debe trabajar en una ocupación que beneficie a otros y que no dañe a nadie. El paso seis es el Esfuerzo Correcto. Uno debe buscar eliminar toda cualidad malvada de adentro y evitar que surjan nuevas. Uno debería buscar conseguir cualidades buenas y morales y desarrollar las que ya posee. Buscar crecer en madurez y perfección hasta lograr el amor universal. El paso siete es la Contemplación Correcta. Uno debe ser observador, contemplativo y debe estar libre del deseo y de la aflicción. El octavo, es la Meditación Correcta. Luego de liberarse uno mismo de todos los deseos y de la maldad, una persona debe concentrar sus esfuerzos en la meditación para que pueda vencer cualquier sensación de placer o dolor, entrar en un estado de consciencia trascendente y lograr un estado de perfección. Los budistas creen que mediante el esfuerzo propio uno puede lograr el estado de paz y dicha eterna llamado Nirvana.
Karma, Samsara y Nirvana
Tres conceptos importantes para entender el budismo son karma, Samsara y Nirvana.
El karma se refiere a la ley de causa y efecto en la vida de una persona, cosechando lo que uno ha sembrado. Los budistas creen que toda persona debe pasar por un proceso de nacimiento y renacimiento hasta que llega al estado de Nirvana en donde rompe el ciclo. Según la ley del karma, “Tú eres lo que eres y lo que haces, como resultado de lo que fuiste e hiciste en una reencarnación anterior, lo cual a su vez fue el resultado inevitable de lo que fuiste e hiciste en encarnaciones aun anteriores.” Para un budista, lo que una persona será en la próxima vida depende de las acciones de esa persona en esta vida presente. Buda creía, a diferencia del hinduismo, que una persona puede romper el ciclo de renacimiento, no importa la clase en que haya nacido.
El segundo concepto clave a entender es la ley de Samsara o de Transmigración. Este es uno de los conceptos más desconcertantes y difíciles de comprender del budismo. La ley de Samsara sostiene que todo está en un ciclo de nacimiento y renacimiento. Buda enseñaba que las personas no tienen almas individuales. La existencia de un yo individual, o ego, es una ilusión. No hay ninguna sustancia eterna de una persona que pasa por el ciclo de renacimiento. ¿Qué es, entonces, lo que pasa por el ciclo si no es el alma individual? Lo que pasa por el ciclo de renacimiento es sólo un conjunto de sensaciones, impresiones, momentos presentes, y el karma que es transmitido. “En otras palabras, así como un proceso conduce a otro, … así también una personalidad humana en una existencia es la causa directa del tipo de individualidad que aparece en la próxima.” El nuevo individuo en la próxima vida no será exactamente la misma persona, pero habrá varias similitudes. Cuán próximos serán en sus identidades, Buda no lo definió.
El tercer concepto clave es el Nirvana. El término significa “la extinción” de la existencia. El Nirvana es muy diferente del concepto cristiano del cielo. El Nirvana no un lugar, como el cielo, sino más bien un estado del ser. Qué es exactamente, Buda nunca lo explicó.
El Nirvana es un estado eterno del ser. Es el estado en que la ley del karma y el ciclo de renacimiento llegan a su fin. Es el fin del sufrimiento, un estado donde no hay deseos y la conciencia individual llega a su fin. Aunque a nuestras mentes occidentales pueda sonar como el aniquilamiento, los budistas objetarían tal idea. Gautama nunca dio una descripción exacta del Nirvana, pero su respuesta más cercana fue esta. “Hay, discípulos, una condición donde no hay ni tierra ni agua, ni aire ni luz, ni espacio sin límites, ni tiempo sin límites, ni ningún tipo de ser, ni ideas ni falta de ideas, ni este mundo ni aquel mundo. No hay ni un levantarse ni un fenecer, ni muerte, ni causa ni efecto, ni cambio, ni detenimiento.” Si bien ningún budista realmente entiende la condición de Nirvana, es su esperanza eterna.
Dios y el Budismo
Se le puede haber ocurrido al lector que en nuestra discusión hasta ahora no se ha hecho ninguna mención de Dios o de una deidad eterna. Está claro que Gautama, el fundador del budismo, no decía que era divino. Él decía ser el que indicaba el camino hacia el Nirvana, pero dependía de cada individuo encontrar su camino hacia allá.
El concepto de un Dios personal no encaja en el sistema budista de religión. Hoy hay muchas sectas budistas. Muchas difieren en su concepto de lo divino y de Buda. En general, los budistas son panteístas en su perspectiva de Dios. Muchos ven a Dios como una fuerza impersonal que está formado por todas las cosas vivas y que mantiene unido al universo.
Esto es lo que dicen algunos de los eruditos más destacados acerca de la perspectiva budista de Dios. El Dr. John Noss declara, “no hay ninguna Persona soberana en los cielos manteniendo todo unido. Sólo existe la unidad personal última del ser mismo, cuya paz envuelve al yo individual cuando deja de llamarse “yo” y se disuelve en la pureza anodina del Nirvana, como una gota de rocío se incorpora a su mar maternal.”
Esto es lo que el ya fallecido Dr. Suzuki, uno de los más grandes maestros del budismo Zen, dice acerca de su concepto de Dios: “Si Dios, después de hacer el mundo se coloca fuera de él, ya no es Dios. Si se separa del mundo o quiere separarse, no es Dios. El mundo no es el mundo cuando está separado de Dios. Dios debe estar en el mundo y el mundo en Dios.”
Dado que el budismo en general no cree en un Dios personal o en un ser divino, no tiene adoración, oración o alabanza de un ser divino. No ofrece ninguna forma de redención, perdón, esperanza celestial o juicio final. El budismo es, por lo tanto, más una filosofía moral, un camino de vida ético.
El profesor Kraemer describe al sistema budista como “una disciplina ética no teísta, un sistema de auto-entrenamiento, antropocéntrico, enfatizando la ética y la cultura de la mente y excluyendo a la religión.”
Desde la muerte de Gautama, se han desarrollado muchas sectas dentro del budismo. Muchas de estas sectas difieren en muchas formas fundamentales, y comparar una con otra es como comparar dos religiones separadas. Muchas sectas han desarrollado su propio concepto único de Dios. Algunas son panteístas en su perspectiva de Dios. Otras son ateas. Todavía otras han desarrollado un sistema politeísta de dioses. Algunas han combinado el panteísmo con el politeísmo. Varias sectas han elevado a Gautama (o Buda) al nivel de salvador o ser divino, aunque está claro que él nunca dijo ser una deidad. Otras sectas han combinado algunas de las doctrinas de Dios de otras religiones con el budismo.
Dado que Buda nunca enfatizó su concepto de lo divino, el budismo se queda con varias de las preguntas más profundas de la vida sin responder, preguntas tales como el origen del universo y el propósito de la existencia del hombre.
Un Estudio Comparativo del Cristianismo y el Budismo
Está bastante claro que el cristianismo y el budismo difieren entre sí en formas fundamentales. Algunas sectas del budismo han tratado de sincronizar a ambos. Sin embargo, los dos son tan distintos que no pueden ser correctos ambos a la vez, ni pueden ambos mezclarse juntos. Aquí va la comparación de estas dos religiones.
Muchas de las escrituras y dichos budistas atribuidos a Gautama fueron escritos unos cuatrocientos años después de su muerte. Para cuando se escribieron, el budismo se había dividido en muchas sectas. ¿Qué es lo que tenemos, entonces? Ni siquiera los mejores eruditos están seguros de la exactitud de las escrituras budistas. En el cristianismo, sin embargo, tenemos un relato histórico preciso escrito por testigos que vieron a Jesús y los eventos que rodearon Su vida.
Ambos difieren en su concepto de Dios. Para los budistas, en general, el Absoluto no juega un papel vital en la vida diaria. Gautama dijo poco acerca de su concepto de Dios. Buda negaba la existencia de un Dios personal, pero era monista en su perspectiva del Absoluto como una fuerza impersonal formada por todas las cosas vivas. La Biblia enseña de un Dios que gobierna el universo y cuida del hombre en una forma personal. Salmos 46:10 declara, “Estad quietos, y conoced que yo soy Dios; seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.”
Está claro que Buda nunca dijo ser una deidad. Si bien varias sectas lo han elevado a la categoría de un dios, él dijo claramente que sólo era un indicador del camino al Nirvana. Jesús, sin embargo, dijo ser Dios y no simplemente un indicador de camino, sino el único camino a la vida eterna. Jesús dijo en Juan 14:6, “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” Juan 1:1 también dice, “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios.”
Hay otra clara distinción entre estas dos religiones. El budismo no ofrece ni la seguridad del perdón ni la vida eterna. Los budistas esperan entrar en un estado de Nirvana, pero no hay ninguna prueba clara y objetiva o alguna enseñanza sobre lo que ocurre más allá de la tumba. Aun Buda mismo no estaba seguro de lo que había más allá de la muerte. No dejó ninguna enseñanza clara sobre el Nirvana o la eternidad. Lo que dejó son especulaciones filosóficas. Hoy el cuerpo de Buda yace en una tumba en Kusinara, al pie del Himalaya. Los hechos de la vida después de la muerte todavía permanecen como un misterio no resuelto en el budismo.
En el cristianismo tenemos a Uno que asombró a Su audiencia porque enseñaba verdades eternas con autoridad. Su autoridad venía del hecho que existió antes de la creación, y probó sus afirmaciones al levantarse de los muertos. La Resurrección de Jesucristo es un hecho probado de la historia y demuestra claramente la autoridad de Cristo sobre el pecado y la muerte. Cuando testificas a un budista, pregúntale esto: “¿Tienes pruebas tangibles de lo que ocurre después de la muerte?” Todo lo que tiene el budista es la esperanza en una enseñanza acerca de la cual no estaba seguro Buda. Como cristianos, tenemos una esperanza cierta en un Salvador resucitado. No hay que adivinar qué pasa más allá de la tumba porque sólo Cristo ha conquistado la tumba.