(NoticiaCristiana.com) kmov.com- Un pastor muerto a balazos durante su sermón dominical desvió el primer tiro del atacante con una biblia, lo cual provocó que el papel saliera por el aire en una escena terrorífica que los asistentes pensaron era actuada, dijo la policía.
El hombre entró caminando a la amplia Primera Iglesia Bautista, construida de ladrillo, en Maryville poco antes de las 8 de la mañana y habló brevemente con el reverendo Fred Winters antes de sacar una pistola calibre .45 semiautomática y dispararle, dijo Larry Trent, director de la policía estatal de Illinois.
El pastor desvió el primero de los cuatro balazos con una biblia, lo cual provocó que el papel saliera por el aire, y acto seguido el arma se trabó y el hombre no pudo seguir disparando. Los fieles derribaron al agresor al piso mientras éste agitaba un cuchillo, con el que se cortó, así como a otras dos personas, señaló Trent.
Ninguno de los aproximadamente 150 asistentes parecía reconocer al pistolero, y los investigadores desconocen los detalles de la conversación que Winters tuvo con él, pero planean revisar una grabación de audio de la ceremonia religiosa, señaló Trent. No hay una grabación en video.
"Pensábamos que era parte de la escenificación de un drama... cuando él disparó, lo que se vio era confeti'', dijo la feligrés Linda Cunningham, cuyo esposo es ministro de educación para adultos en la iglesia.
"Simplemente nos quedamos sentados preguntándonos qué pasaría después, sin percatarnos que había herido al pastor''.
Winters había estado de pie sobre una plataforma elevada para pronunciar su sermón, el cual versaba sobre hallar felicidad en el lugar de trabajo, y logró correr hasta la mitad del pasillo lateral del recinto religioso antes de desplomarse, agregó Cunningham.
Dos asistentes derribaron al atacante cuando éste sacó el cuchillo de 10 centímetros (cuatro pulgadas), y los tres resultaron heridos por el arma, dijo la policía. El pistolero sufrió ``una herida bastante grave en el cuello'', mientras que uno de los feligreses sufrió lesiones en la región lumbar, señaló Trent.
Los asistentes derribaron al agresor entre las bancas, y lo contuvieron en el suelo hasta que llegó la policía, dijo Don Bohley, un miembro de la iglesia que se encontraba fuera del templo cuando comenzó la balacera.
"La gente salió corriendo y nos dijo que llamáramos al 911 (el teléfono de emergencias)'', dijo Bohley, de 72 años.
Winters fue declarado muerto en el Hospital Anderson, dijo la vocera Natalie Head.
Las autoridades no saben si Winters, un padre de dos hijos que había encabezado la iglesia casi por 22 años, conocía al pistolero. La policía describió al agresor como un hombre de 27 años de la ciudad cercana de Troy pero no quiso dar a conocer su nombre a la espera de posibles cargos en su contra.
Trent dijo que hasta el momento los investigadores no habían descubierto evidencia de antecedentes delictivos o de una enfermedad mental.
"No sabemos nada sobre la relación (entre el pistolero y el pastor), por qué está aquí o cuáles fueron las circunstancias que provocaron que él se encontrara aquí'', señaló el policía Ralph Timmins.
El reverendo Mark Jones, otro pastor en la Primera Iglesia Bautista, dijo que él no reconocía al atacante, al que vio brevemente antes de que el hombre sacara su pistola. Jones entró a una habitación adyacente y no vio el tiroteo, aunque escuchó un sonido parecido al de pequeños cohetes de artificio.
"No tenemos idea de cuáles eran los móviles de este tipo'', dijo Jones fuera de la iglesia. "No sabemos si alguna vez llegaremos a saberlo''.
El pistolero y el feligrés Terry Bullard, de 39 años, fueron operados en el Hospital de la Universidad de San Luis y se encontraban en estado grave el domingo por la noche, dijo la vocera Laura Keller. La otra víctima, Keith Melton, fue atendida y dada de alta del Centro Médico Regional Gateway.
"Yo lo llamaría una acción heróica'', dijo Trent. "Aunque muchos, por ra
zones comprensibles, se quedaron en sus asientos, ellos (los heridos) actuaron''. Además de pastor en el templo, Winters era ex presidente de la Asociación Estatal Bautista de Illinois y profesor adjunto del Seminario Teológico Bautista del Medio Oeste, de acuerdo con el sitio de la iglesia en la internet.
"A nuestro gran Dios no le sorprende esto, ni nada'', dijo Nate Adams, director ejecutivo de la Asociación Estatal Bautista de Illinois, en un comunicado.
"El que El permita que el mal y el libre albedrío se salgan con la suya en tragedias como ésta es en muchas formas un misterio. Pero sabemos que podemos confiar en El sin importar lo que pase, y acercarnos a El bajo cualquier circunstancia''. Maryville está a unos 32 kilómetros (20 millas) al noreste de San Luis.
