About

Internet: La red Web Mundial (Parte 2)

Internet: La red Web Mundial 2
Tal vez es porque la web es una tecnología tan nueva, tal vez porque es tan privada, pero por cualquier razón que sea, algunas personas creen que no se aplican a la web las normas habituales. Apretarán el ratón en espacios pornográficos de la web aun cuando nunca comprarían una revista Playboy o rentarían un video clasificado sólo para adultos.
Seamos sinceros, la pornografía es pornografía en cualquier lugar que la encuentres. Y nunca es algo apropiado para un cristiano. Ni tampoco son apropiados la violencia, la enemistad o el racismo. Sí, hay espacios de web que defienden todas esas cosas. Sí, puedes encontrarlos si los buscas. Sí, puedes encontrarte de casualidad en forma ocasional con ellos cuando estás buscando alguna otra cosa (aunque las posibilidades de que eso ocurra son mucho menores si usas algún software disponible para eliminar esos espacios). Tu respuesta debería ser exactamente la misma como sería si te encuentras con lo mismo en la televisión, en un libro, o en la vida real. ¡Sal de ahí! Apaga el aparato. No pierdas tu tiempo allí.

Hablando de malgastar tiempo, hay todavía otro peligro con el uso de la web para entretenimiento. Es posible que puedas estar visitando sólo lugares de la web que son positivos, incluso cristianos, pero con todo tu uso de la web puede aun ser dañina para tu vida espiritual. Verdaderamente, el navegar por la web puede ser adictivo. Algunas personas gastan horas y horas cada día con la web, descuidando la familia y los amigos, el ejercicio, el sueño, el trabajo, el colegio y el tiempo que deben pasar con Dios. Coloca tus prioridades en orden. Sentarse frente a tu computadora 12 horas por día no es más saludable que tenderse frente a la televisión por la misma cantidad de tiempo.

Si piensas que puedes estar usando demasiado la web, se honesto contigo mismo. Examina cuanto tiempo estás gastando al estar en línea y si te estorba tus otras actividades. Tal vez necesitas darte una "vacación de la web", hasta que sientes que puedes colocar en orden tus prioridades.

Hemos visto que la web es potencialmente una gran fuente de información y que si se usa correctamente, también puede ser una gran forma de entretenimiento. Pero el aspecto más poderoso de la web es su habilidad para reunir a las personas.
En primer lugar, la gente usa la web para ponerse en contacto con amigos y familiares que viven separados por muchos kilómetros. Sea que envíes cartas por correo electrónico, hagas arreglos para encontrarte en un espacio para charlar, o coloques fotos de la familia en un espacio de la web para que las vea tu abuelita, puedes usar la web para fortalecer las relaciones que ya tienes.

Pero lo que es más fascinante, y polémico, es usar la web para hacer nuevas amistades. Hay muchas formas de hacer esto. Una de las más comunes es por medio de los espacios para charlar donde las personas se encuentran para "charlar" o "platicar" acerca de intereses comunes. Los espacios para charlar van desde espacios donde los cristianos se encuentran en línea para estudiar la Biblia, hasta espacios donde la gente se reúne para debatir abiertamente tópicos pervertidos. Te toca a ti ejercitar la selección y prudencia al decidir dónde charlar y con quién. La gente también se encuentra "en línea" por medio de carteleras de mensajes y nuevos grupos de personas que usan la web, en los que puedes anunciar un mensaje sobre un tema que te interese y volver a revisar más tarde para ver si alguien contestó tu anuncio.

Los espacios para charlas, las carteleras de mensajes, y grupos nuevos, todos comienzan a asumir un sentido de comunidad cuando las mismas personas usan esos espacios vez tras vez y llegan a conocerse mutuamente. Con la tecnología actual, la mayoría de las personas "charlan" escribiendo sus palabras en la pantalla, así que tal vez nunca llegan a ver al otro o a escucharlo. A pesar de esto, se forman amistades al estar conectados en la línea de Internet. Puedes ir desde debatir un pasatiempo en el que estás interesado hasta compartir preocupaciones y problemas de tu vida diaria, y aun (en muchos espacios cristianos) solicitar oraciones y aliento de otros compañeros creyentes.

Las amistades que hacemos cuando estamos en línea pueden ser maravillosas Pero vienen junto con una advertencia importante. No ves a esas personas. No conoces nada acerca de ellos, excepto cuando eligen escribir en sus computadoras. La mayor parte de las personas te están diciendo probablemente la verdad acerca de su edad, su sexo, sus intereses y otras características, pero no hay nada para detener a alguien que mienta al dar esos datos. Sé muy cauteloso con la gente con la que charlas cuando estás en línea. Recuerda, alguien en tu espacio de charlar puede ser que no sea quien dice que es. Es triste, pero es verdad, que hay gente enferma allí en línea, que están al acecho en los espacios para charlar para adolescentes, buscando adolescentes de los que puedan aprovecharse.

¿Significa esto que nunca debes charlar, colocar mensajes o familiarizarte de alguna manera con las personas que están en la línea? No, significa simplemente que debes ser consciente de las reglas de seguridad. Nunca divulgues tu nombre real (la mayoría de los espacios para charlas en Internet y otros espacios en la web te permiten usar un apodo), Nunca des tu dirección o el número de tu teléfono. Mantén a tus amistades que están en línea, en línea, es decir, no hagas planes para encontrarte con ellos en la vida real. Se muy cuidadoso en cuanto a transmitir información, ya sea la ciudad donde vives, el nombre de tu escuela, el nombre de un equipo en el que juegas, porque eso puede permitir que uno que te sigue los pasos, que está al acecho te identifique. Puedes compartir lo que pasa en tu vida con los amigos que están en la línea sin tener que dar una cantidad de detalles.

Puedes usar la web (WWW) para juntar información, para divertirte y para "encontrar" a nuevas personas. Sé inteligente para proteger tu privacidad, y usa las mismas pautas que usarías con cualquier medio de difusión para asegurarte que lo que examinas es positivo, que no daña tu fe cristiana. Tus amigos cristianos están allí, en línea. (Empieza a navegar y prepárate para encontrarte con ellos!

Con la tecnología de Blogger.

Sample

Followers

Vistas de página en total

Internet: La red Web Mundial (Parte 2)

Internet: La red Web Mundial 2
Tal vez es porque la web es una tecnología tan nueva, tal vez porque es tan privada, pero por cualquier razón que sea, algunas personas creen que no se aplican a la web las normas habituales. Apretarán el ratón en espacios pornográficos de la web aun cuando nunca comprarían una revista Playboy o rentarían un video clasificado sólo para adultos.
Seamos sinceros, la pornografía es pornografía en cualquier lugar que la encuentres. Y nunca es algo apropiado para un cristiano. Ni tampoco son apropiados la violencia, la enemistad o el racismo. Sí, hay espacios de web que defienden todas esas cosas. Sí, puedes encontrarlos si los buscas. Sí, puedes encontrarte de casualidad en forma ocasional con ellos cuando estás buscando alguna otra cosa (aunque las posibilidades de que eso ocurra son mucho menores si usas algún software disponible para eliminar esos espacios). Tu respuesta debería ser exactamente la misma como sería si te encuentras con lo mismo en la televisión, en un libro, o en la vida real. ¡Sal de ahí! Apaga el aparato. No pierdas tu tiempo allí.

Hablando de malgastar tiempo, hay todavía otro peligro con el uso de la web para entretenimiento. Es posible que puedas estar visitando sólo lugares de la web que son positivos, incluso cristianos, pero con todo tu uso de la web puede aun ser dañina para tu vida espiritual. Verdaderamente, el navegar por la web puede ser adictivo. Algunas personas gastan horas y horas cada día con la web, descuidando la familia y los amigos, el ejercicio, el sueño, el trabajo, el colegio y el tiempo que deben pasar con Dios. Coloca tus prioridades en orden. Sentarse frente a tu computadora 12 horas por día no es más saludable que tenderse frente a la televisión por la misma cantidad de tiempo.

Si piensas que puedes estar usando demasiado la web, se honesto contigo mismo. Examina cuanto tiempo estás gastando al estar en línea y si te estorba tus otras actividades. Tal vez necesitas darte una "vacación de la web", hasta que sientes que puedes colocar en orden tus prioridades.

Hemos visto que la web es potencialmente una gran fuente de información y que si se usa correctamente, también puede ser una gran forma de entretenimiento. Pero el aspecto más poderoso de la web es su habilidad para reunir a las personas.
En primer lugar, la gente usa la web para ponerse en contacto con amigos y familiares que viven separados por muchos kilómetros. Sea que envíes cartas por correo electrónico, hagas arreglos para encontrarte en un espacio para charlar, o coloques fotos de la familia en un espacio de la web para que las vea tu abuelita, puedes usar la web para fortalecer las relaciones que ya tienes.

Pero lo que es más fascinante, y polémico, es usar la web para hacer nuevas amistades. Hay muchas formas de hacer esto. Una de las más comunes es por medio de los espacios para charlar donde las personas se encuentran para "charlar" o "platicar" acerca de intereses comunes. Los espacios para charlar van desde espacios donde los cristianos se encuentran en línea para estudiar la Biblia, hasta espacios donde la gente se reúne para debatir abiertamente tópicos pervertidos. Te toca a ti ejercitar la selección y prudencia al decidir dónde charlar y con quién. La gente también se encuentra "en línea" por medio de carteleras de mensajes y nuevos grupos de personas que usan la web, en los que puedes anunciar un mensaje sobre un tema que te interese y volver a revisar más tarde para ver si alguien contestó tu anuncio.

Los espacios para charlas, las carteleras de mensajes, y grupos nuevos, todos comienzan a asumir un sentido de comunidad cuando las mismas personas usan esos espacios vez tras vez y llegan a conocerse mutuamente. Con la tecnología actual, la mayoría de las personas "charlan" escribiendo sus palabras en la pantalla, así que tal vez nunca llegan a ver al otro o a escucharlo. A pesar de esto, se forman amistades al estar conectados en la línea de Internet. Puedes ir desde debatir un pasatiempo en el que estás interesado hasta compartir preocupaciones y problemas de tu vida diaria, y aun (en muchos espacios cristianos) solicitar oraciones y aliento de otros compañeros creyentes.

Las amistades que hacemos cuando estamos en línea pueden ser maravillosas Pero vienen junto con una advertencia importante. No ves a esas personas. No conoces nada acerca de ellos, excepto cuando eligen escribir en sus computadoras. La mayor parte de las personas te están diciendo probablemente la verdad acerca de su edad, su sexo, sus intereses y otras características, pero no hay nada para detener a alguien que mienta al dar esos datos. Sé muy cauteloso con la gente con la que charlas cuando estás en línea. Recuerda, alguien en tu espacio de charlar puede ser que no sea quien dice que es. Es triste, pero es verdad, que hay gente enferma allí en línea, que están al acecho en los espacios para charlar para adolescentes, buscando adolescentes de los que puedan aprovecharse.

¿Significa esto que nunca debes charlar, colocar mensajes o familiarizarte de alguna manera con las personas que están en la línea? No, significa simplemente que debes ser consciente de las reglas de seguridad. Nunca divulgues tu nombre real (la mayoría de los espacios para charlas en Internet y otros espacios en la web te permiten usar un apodo), Nunca des tu dirección o el número de tu teléfono. Mantén a tus amistades que están en línea, en línea, es decir, no hagas planes para encontrarte con ellos en la vida real. Se muy cuidadoso en cuanto a transmitir información, ya sea la ciudad donde vives, el nombre de tu escuela, el nombre de un equipo en el que juegas, porque eso puede permitir que uno que te sigue los pasos, que está al acecho te identifique. Puedes compartir lo que pasa en tu vida con los amigos que están en la línea sin tener que dar una cantidad de detalles.

Puedes usar la web (WWW) para juntar información, para divertirte y para "encontrar" a nuevas personas. Sé inteligente para proteger tu privacidad, y usa las mismas pautas que usarías con cualquier medio de difusión para asegurarte que lo que examinas es positivo, que no daña tu fe cristiana. Tus amigos cristianos están allí, en línea. (Empieza a navegar y prepárate para encontrarte con ellos!