Los oficiales pusieron de relieve que la evacuación es una posibilidad muy remota y que el gobierno de Washington no está planeando en estos momentos llevarla a cabo. Los estadounidenses que deseen abandonar la región actualmente pueden hacerlo a través de las líneas aéreas comerciales.
"Esta es
una diligencia que debemos cumplir. Es mejor estar preparados para el caso de que se precise", aseveró un funcionario. Ambos oficiales destacaron que los barcos serán utilizados únicamente para ayudar a los estadounidenses y no participarán en ningún combate.
Los navíos, con 2.500 infantes de marina a bordo, tenían programado regresar a Norfolk, Virginia para después del "Día de Acción de Gracias", pero cuando estaban al oeste de Gibraltar recibieron la orden de volver al Mediterráneo oriental.
Estados Unidos también tiene emplazados entre tres y cuatro barcos, capaces de interceptar misiles balísticos frente a la costa de Israel. Este despliegue se ha estirado unos meses de cara a una amenaza potencial balística por parte de Irán
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