Entre otros adelantos, los visitantes israelíes y extranjeros, pudieron conocer el desarrollo de Aqua Israel. Prevé equipar aviones no tripulados con sistemas que pueden condensar agua desde el aire y permiten que el vehículo permanezca durante seis meses en vuelo, sin tocar tierra.
Capaz de operar en las alas de un avión no tripulado o en un lugar fijo, el sistema se compone de células fotovoltaicas de paneles solares de un metro cuadrado cada uno, que proporcionan la energía para transformar el aire en agua, captando la humedad del ambiente.Combinado con un átomo de hidrógeno como combustible, los paneles solares pueden darle al avión no tripulado energía suficiente para volar posiblemente durante seis meses sin aterrizar. El experto señaló, sin embargo, que la tecnología no estará disponible hasta dentro de tres años. El Ejército israelí ya declaró su interés en adquirirla.
Otra compañía centrada en el agua, Amiad, lanzó cinco nuevos productos de filtración en Agritech, con una tecnología en base de polímeros. La compañía espera que los productos, desarrollados por Amiad y su subsidiaria Arkal -permitan ahorrar dinero y reducir el consumo de agua en
el riego.
Cerca del panel de Amiad, la Autoridad del Agua organizó un paseo a través de grandes recintos, donde los visitantes identificaron un mapa de colores de Israel y examinar la cantidad de agua que se pierde en la evaporación en promedio por año, así como el volumen de precipitaciones que recibe cada región. Entre las pancartas pusieron distintas pantallas táctiles LCD, donde los visitantes pudieron calcular la cantidad de agua que debería usarse en los huertos familiares de cada uno, en función del tamaño de jardín y el clima medio de la región de la última década.
De esta manera, la gente no tendrá que desperdiciar agua y dinero regando sus jardines más de lo necesario, dijo un portavoz de la Autoridad del Agua.
Fuera del pabellón, en el área de exposición al aire libre, la Autoridad también presentó un jardín de 120 metros cuadrados, con cerca de 30 tipos de plantas, la mayoría de las que no consumen mucha agua. En gran porcentaje dan flores de colores. En lugar de la plantación de rosas y flores, que consumen grandes cantidades de agua, la gente puede renovar sus jardines con plantas que ahorran agua, como la “suculenta-” (especie entre las que el aloe vera es el más conocido) y reducir su consumo de agua en un 30 a 40%, dijo.
Cerca del panel de Amiad, la Autoridad del Agua organizó un paseo a través de grandes recintos, donde los visitantes identificaron un mapa de colores de Israel y examinar la cantidad de agua que se pierde en la evaporación en promedio por año, así como el volumen de precipitaciones que recibe cada región. Entre las pancartas pusieron distintas pantallas táctiles LCD, donde los visitantes pudieron calcular la cantidad de agua que debería usarse en los huertos familiares de cada uno, en función del tamaño de jardín y el clima medio de la región de la última década.
De esta manera, la gente no tendrá que desperdiciar agua y dinero regando sus jardines más de lo necesario, dijo un portavoz de la Autoridad del Agua.
Fuera del pabellón, en el área de exposición al aire libre, la Autoridad también presentó un jardín de 120 metros cuadrados, con cerca de 30 tipos de plantas, la mayoría de las que no consumen mucha agua. En gran porcentaje dan flores de colores. En lugar de la plantación de rosas y flores, que consumen grandes cantidades de agua, la gente puede renovar sus jardines con plantas que ahorran agua, como la “suculenta-” (especie entre las que el aloe vera es el más conocido) y reducir su consumo de agua en un 30 a 40%, dijo.
